Alrededor del 70% de los directores financieros encuestados calificaron el crédito de "costoso", reflejo de la subida del tipo básico británico al 3,5%, y sólo el 28% de ellos esperaban que la demanda del mismo por parte de su empresa aumentara en los próximos 12 meses.

Además, el 45% de los directores financieros afirmó que era difícil conseguir nuevos créditos, según la encuesta.

El economista jefe de Deloitte, Ian Stewart, afirmó que el endurecimiento más agresivo de la política monetaria en más de 30 años estaba reconfigurando la actitud de las empresas ante el endeudamiento.

"Desde la crisis crediticia, los directores financieros no habían calificado la deuda como una fuente de financiación menos atractiva para sus empresas que en la actualidad", afirmó.

"Cuando los tipos de interés estaban en niveles muy bajos, la financiación mediante deuda eclipsaba fácilmente a los fondos propios como fuente de financiación. Ahora los directores financieros las ven más o menos a la par".

A pesar del difícil entorno económico, la percepción del riesgo externo por parte de los ejecutivos, y en particular de la inflación, se ha suavizado desde el máximo alcanzado en octubre, según la encuesta.

Por término medio, los directores financieros prevén que la inflación, que en noviembre se situaba en el 10,7%, descenderá al 5,8% dentro de un año y se situará en el 3,3% dentro de dos años, según la encuesta.

Deloitte dijo que encuestó a 78 directores financieros, de los cuales 17 pertenecían a empresas del FTSE 100 y 32 al FTSE 250, entre el 6 y el 16 de diciembre.