La economía de la región se expandirá un 3,4% este año y un 3,8% en 2024 a medida que la caída de la inflación impulse el consumo privado, frente al 2,4% de 2023, según el Banco Mundial en su informe bianual El pulso de África.

Muchos países del África subsahariana se vieron duramente afectados por los choques de la COVID-19 y la guerra de Rusia en Ucrania, que dispararon la inflación al mismo tiempo que la subida de los tipos de interés mundiales encarecía prohibitivamente los préstamos. La sequía y los conflictos también han afectado a franjas de la región.

"El crecimiento va a repuntar en el África subsahariana, pero la recuperación sigue siendo frágil", afirma el informe. "El ritmo de la expansión económica en la región sigue siendo lento e insuficiente para tener un efecto significativo en la reducción de la pobreza".

"Un crecimiento del PIB per cápita del 1% se asocia a una reducción de la pobreza de sólo el 1% en la región, frente al 2,5% en el resto del mundo".

Se prevé que la tasa de crecimiento de Sudáfrica se duplique en 2024, pero sólo hasta el 1,2%, mientras que la de Angola repuntará hasta el 2,8% desde el 0,8% del año pasado, impulsada principalmente por el sector no petrolero en medio de la caída de la producción de petróleo.

En cambio, se espera que la región de la Comunidad del África Oriental crezca un 5,3% este año, debido al fuerte crecimiento de Kenia, Ruanda, Uganda y la República Democrática del Congo.

Se prevé que la mayor economía de África Occidental, Nigeria, crezca un 3,3% este año, por debajo de su media a largo plazo.

Zambia incumplirá el pago de su deuda externa en 2020, seguida de Ghana en 2022 y Etiopía a finales del año pasado.

Se prevé que la ratio deuda pública/PIB del África subsahariana descienda del 61% en 2023 al 57% este año, pero más de la mitad de los países aún se encuentran en situación de endeudamiento o en alto riesgo de estarlo, según el informe.

Señalaba que el endeudamiento externo seguía siendo más caro que antes de la pandemia, a pesar de que los costes empezaban a bajar.

"Normalmente, cuando los países se encuentran en estas situaciones, otra gran sacudida podría enviar a muchos de estos países a este tipo de crisis financieras y, por tanto, al impago", declaró Andrew Dabalen, economista jefe para África del Banco Mundial, en una rueda de prensa, pero añadió: "No podemos decir si va a haber otro impago o no".