El viernes se publicará el informe de nóminas no agrícolas, muy vigilado, en el que se espera que la economía estadounidense haya añadido 225.000 puestos de trabajo en junio.
La publicación sigue a los datos del jueves que mostraron que las nóminas privadas aumentaron el mes pasado, mientras que el número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidio de desempleo aumentó moderadamente la semana pasada, lo que sugiere que el mercado laboral se mantiene en terreno sólido.
Esto hizo que los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. se dispararan a medida que crecían las apuestas de que la Fed aún tiene que subir más los tipos para frenar la inflación, lo que mantuvo al dólar en niveles elevados en las primeras operaciones asiáticas del viernes.
Frente al billete verde, el euro cedió un 0,02% hasta los 1,0890 dólares, mientras que el dólar neozelandés se resarcía de algunas de sus pérdidas de la sesión anterior y subía un 0,09% hasta los 0,6163 dólares.
La libra esterlina también bajó frente al dólar y se compró por última vez a 1,2734 $, aunque el jueves había subido a un máximo de dos semanas de 1,2780 $, ya que los mercados apuestan a que el Banco de Inglaterra subirá los tipos de interés al 6,5% a principios del año que viene, por encima del máximo previsto anteriormente del 6,25%.
"Los sólidos datos (estadounidenses) impulsaron las expectativas del mercado de una segunda subida de tipos del FOMC, que antes no se consideraba posible", dijo Carol Kong, estratega de divisas del Commonwealth Bank of Australia, refiriéndose a una subida adicional de tipos por parte de la Fed tras el probable aumento de 25 puntos básicos de este mes.
"Esos datos sugieren que las nóminas de esta noche y quizá el dato de los ingresos medios (podrían) batir de nuevo la estimación del consenso, y si obtenemos otro resultado fuerte, eso podría reafirmar aún más al dólar".
El índice del dólar subió un 0,03% hasta 103,12, mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense rondaron sus máximos recientes.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, que suele reflejar las expectativas de tipos de interés a corto plazo, se mantuvo por encima del 5%, después de subir el jueves a un máximo de 16 años del 5,12%.
El rendimiento de referencia a 10 años se situó por última vez en el 4,0431%, no muy lejos del máximo de cuatro meses de la sesión anterior del 4,0830%.
Eso mantuvo una parte muy vigilada de la curva de rendimientos del Tesoro estadounidense de dos a 10 años, vista como un indicador de las expectativas económicas, profundamente invertida en 96,90 puntos básicos negativos.
"El mercado de bonos, al menos, sigue preocupado por el impacto de la política monetaria restrictiva de EE.UU. en la economía y, de hecho, seguimos esperando que la economía estadounidense entre en recesión a finales de este año", dijo Kong.
En otros lugares, el yen se compró por última vez a 144,06 por dólar y se encaminaba a una ligera ganancia semanal, revirtiendo tres semanas consecutivas de pérdidas.
Esta semana, la divisa japonesa se había visto impulsada por las ganancias de los activos refugio ante el menor apetito por el riesgo, debido a la preocupación por las perspectivas de crecimiento mundial.
El dólar australiano subió un 0,09% hasta los 0,66315 dólares, aunque parecía encaminado a prolongar una tercera semana consecutiva de pérdidas, presionado aún más por la vacilante recuperación económica de China.
