Frente a una cesta de divisas, el dólar subió un 0,253% hasta 102,90, tras haber ganado un 0,2% durante la noche en unas operaciones moderadas durante el festivo estadounidense del lunes.
El euro cayó un 0,3% a 1,09185 dólares, en lo que fue su mayor caída porcentual en un día en dos semanas. La libra esterlina cotizaba por última vez a 1,2681 dólares, un 0,36% menos en el día, alejándose de un máximo de casi cinco meses de 1,2825 dólares alcanzado a finales de diciembre.
Los comentarios de los responsables del Banco Central Europeo en contra de un recorte anticipado de los tipos ensombrecieron las perspectivas de los tipos a nivel mundial. "Es demasiado pronto para hablar de recortes, la inflación es demasiado alta", declaró el lunes Joachim Nagel, del BCE, añadiendo que debería evitarse el error de bajar los tipos de interés demasiado pronto.
Los mercados monetarios están valorando en 145 puntos básicos los recortes del tipo de depósito del BCE este año, muy probablemente a partir de abril.
"Los comentarios de halcones del BCE de anoche han alimentado la preocupación de que los precios del mercado para la senda de tipos de la Reserva Federal puedan ser también agresivos", dijo Charu Chanana, jefe de estrategia de divisas de Saxo en Singapur.
"También es probable que entre en juego cierta demanda de refugio con la escalada de las perturbaciones en el Mar Rojo".
Un funcionario del movimiento Houthi de Yemen dijo el lunes que el grupo ampliará sus objetivos en la región del Mar Rojo para incluir buques estadounidenses, prometiendo mantener los ataques después de los ataques estadounidenses y británicos contra sus sitios en Yemen.
Los inversores se preparan ahora para los comentarios de Christopher Waller, de la Reserva Federal, cuyo giro pesimista a finales de noviembre contribuyó a que los mercados se dispararan en una fulgurante subida de fin de año. Waller tiene previsto hablar más tarde el martes.
Los mercados están valorando en un 70% la posibilidad de un recorte de 25 puntos básicos (pb) en marzo por parte de la Fed, frente al 77% de un día antes y el 63% de una semana antes, según mostró la herramienta FedWatch de CME, lo que pone de relieve el cambio de expectativas sobre los recortes de tipos.
Sin embargo, los operadores proyectan recortes de más de 160 pb este año, frente a los 140 pb de relajación previstos la semana pasada.
"Creemos que el mercado puede haberse adelantado a sí mismo poniendo en precio casi siete recortes de 25 pb de la Fed este año", dijo Hamish Pepper, estratega de renta fija y divisas de Harbour Asset Management, añadiendo que es probable que el dólar encuentre apoyo si los mercados reevalúan las expectativas de relajación e impulsan al alza los tipos de interés a corto plazo.
"Sí, la inflación ha caído más rápidamente de lo esperado, incluidas las medidas básicas, pero el mercado laboral sigue pareciendo demasiado caliente y puede dificultar que la inflación vuelva al 2%".
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años subió 5,3 puntos básicos hasta el 4,003%, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a dos años, que suele moverse al compás de las expectativas de tipos de interés, subió 7,3 puntos básicos hasta el 4,211%.
Nos espera una semana cargada de datos, con informes sobre el crecimiento del cuarto trimestre en China y las ventas minoristas en Estados Unidos, todos ellos previstos para el miércoles. Los datos de empleo e inflación de esta semana serán el centro de atención de los operadores de la libra esterlina para ayudar a afinar sus modelos de tipos de interés.
Los mercados están valorando alrededor de 120 puntos básicos de recortes de tipos por parte del Banco de Inglaterra en 2024, con el primero muy probablemente en mayo.
Mientras tanto, el yen se debilitó un 0,20%, hasta los 146,07 por dólar, después de que los datos mostraran que la inflación mayorista de Japón se mantuvo estable en diciembre respecto a hace un año, ralentizándose por duodécimo mes consecutivo.
Los datos sugieren que el aumento de la inflación al consumo se moderará en los próximos meses y quitará presión al Banco de Japón para que retire pronto su estímulo masivo.
Las expectativas de un cambio de política por parte del BOJ habían impulsado al yen hacia finales de 2023, y la divisa ganó un 5% frente al dólar en diciembre. Desde entonces ha caído bruscamente y ha perdido un 3% en lo que va de enero. En el resto del mundo, el dólar australiano cayó un 0,53% hasta los 0,6625 dólares, mientras que el dólar neozelandés retrocedió un 0,46% hasta los 0,61715 dólares.
