"El Consejo Federal (gabinete) es de la opinión de que los aumentos de precios hasta la fecha son soportables para los hogares", dijo en un comunicado.

No obstante, siguió analizando la evolución de los mercados energéticos y su impacto en los hogares y las empresas y volvería a evaluar la situación después de que un grupo de trabajo sobre los precios de la energía presentara un informe en octubre, añadió.

Señaló que la inflación de los precios al consumo, del 3,4% en julio, era la más alta en más de dos décadas, pero era mucho más baja que en la zona euro y se preveía que el año que viene bajara del 2,5% al 3% que los economistas esperan este año.

La economía también estaba funcionando bien y el desempleo era bajo, señaló.

Dijo que modificaría las normas sobre el carbono para que las empresas a las que se les inste o se les obligue a cambiar las fuentes de energía del gas natural al gasóleo de calefacción en medio de la inminente escasez de gas en invierno puedan ver eximidas temporalmente las emisiones adicionales del control de las obligaciones de reducción de emisiones.