El ganador de las elecciones británicas de este año debe suprimir las normas presupuestarias que frenan el crecimiento económico y que no pueden cumplirse sin aumentar los impuestos, afirmó el jueves un destacado grupo de reflexión.

El primer ministro, Rishi Sunak, y su ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, siguen un objetivo autoimpuesto de reducción de la deuda pública como porcentaje del producto interior bruto para 2028-29.

El Partido Laborista de la oposición, que va muy por delante en los sondeos de opinión, afirma que mantendrá esta norma para demostrar su control sobre las finanzas públicas.

Pero el Instituto Nacional de Investigación Económica y Social afirmó que el objetivo está limitando la inversión pública, clave para el crecimiento a largo plazo y para solucionar los problemas de desigualdad.

El director adjunto del NIESR, Stephen Millard, afirmó que es probable que el crecimiento económico se estanque en torno al 1% anual.

Eso dificultaría que Gran Bretaña invirtiera en infraestructuras y en la transición neta a cero -además de aumentar el gasto en unos servicios públicos sometidos a tensiones- sin subir los impuestos o flexibilizar las reglas fiscales, dijo.

El NIESR preveía que la deuda del sector público, incluidas las tenencias de bonos del Banco de Inglaterra, iba camino de seguir aumentando y alcanzar el 102,2% del PIB dentro de cinco años.

"Son los objetivos los que están obligando a los gobiernos a poner freno a la economía", dijo Millard. "Pero, por supuesto, no puedes limitarte a gastar y gastar y gastar. Tienes que justificar por qué lo haces y tienes que demostrar que al final el dinero volverá".

Los mercados financieros no se resistirían si los futuros ministros de finanzas británicos expusieran bien los argumentos a favor del endeudamiento para financiar el crecimiento futuro, afirmó Millard.

El mercado de bonos británico entró en barrena en 2022 por los planes de recortes fiscales radicales anunciados durante el breve mandato de la ex primera ministra Liz Truss.

El NIESR señaló que los recortes fiscales deberían dirigirse más estrictamente a los hogares con rentas bajas, después de que los hogares más ricos también se beneficiaran de ayudas para compensar la subida de los precios de la energía en 2022 y de recortes en las cotizaciones a la seguridad social.

El NIESR afirmó que la economía británica crecería un 0,8% en 2024, una cifra ligeramente inferior a la previsión anterior realizada en febrero del 0,9%.

Es probable que el Banco de Inglaterra comience a recortar los tipos de interés en agosto, con una única reducción más en 2024 y otras dos en 2025, ya que el banco central se mueve con cautela ante los riesgos de inflación, según el grupo de expertos. (Redacción de William Schomberg; Edición de Toby Chopra)