El huracán Beryl se dirigió el martes hacia Jamaica como una poderosa tormenta de categoría 5 tras tocar tierra en islas menores del Caribe, derribando tendidos eléctricos, provocando inundaciones y, según los informes, matando a dos personas.

La tormenta tocó tierra el lunes en la isla de Carriacou, parte de Granada, donde murió una persona, informó la BBC, y se cortó el suministro eléctrico en toda la isla. Al parecer, otra persona murió en San Vicente, aunque Reuters no pudo verificar inmediatamente ninguna de las dos víctimas mortales.

Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de EE.UU., se espera que Beryl traiga entre 10 y 12 centímetros de precipitaciones a Jamaica el miércoles, lo que podría provocar inundaciones repentinas.

A partir de las 1200 GMT, Beryl, con vientos de hasta 165 millas por hora (250 kilómetros por hora), estaba a unas 625 millas (1.006 km) al este-sureste de Kingston, la capital de Jamaica, dijo.

El momento inusualmente temprano y la rápida intensificación de la tormenta, la primera de la temporada de huracanes de este año en el Atlántico, se deben en parte a las temperaturas más cálidas del océano, según los científicos.

Jamaica emitió el lunes un aviso de huracán, mientras que estaban en vigor avisos de tormenta tropical para partes de las costas meridionales de la República Dominicana y Haití.

La tormenta "potencialmente catastrófica" golpeó la región del Caribe a primera hora del día como una tormenta de categoría 4 y se esperaba que trajera vientos potencialmente mortales y una marejada ciclónica a Jamaica.

Aunque ha subido a 5 en una escala de cinco puntos, se esperaba que perdiera intensidad a lo largo del día, dijo el NHC.

El centro de la tormenta "se desplazará rápidamente por el sureste y el centro del mar Caribe hoy y se prevé que pase cerca de Jamaica el miércoles y de las islas Caimán el jueves", dijo la agencia meteorológica.

En otras islas del Caribe oriental, los residentes habían tapiado las ventanas, se habían abastecido de alimentos y habían cargado los coches de combustible antes de la tormenta.

Decenas de barcos en la trayectoria de la tormenta corren el riesgo de verse afectados, con desvíos vistos en el Caribe, según Vortexa, que proporciona datos de seguimiento de cargas energéticas.

Las autoridades de México también han comenzado a prepararse para la llegada de Beryl a finales de esta semana, y el gobierno federal ha instado a las autoridades y a los ciudadanos a mostrar "extrema precaución".