El sector de la aviación está luchando por conseguir el personal necesario para hacer frente a un aumento post-pandémico de los viajes aéreos, lo que ha llevado al aeropuerto londinense de Heathrow a imponer restricciones de capacidad para evitar retrasos, en una medida que ha provocado un enfrentamiento público con Emirates de Dubai.
En declaraciones a los periodistas en el Salón Aeronáutico de Farnborough, el director ejecutivo de Qatar Airways, Akbar Al Baker, declinó hacer comentarios directamente sobre Heathrow, donde forma parte del consejo de administración. La Autoridad de Inversiones de Qatar posee el 20% del centro de operaciones más concurrido de Gran Bretaña.
"Nos enfrentamos al mismo problema en Francia, Bélgica, Holanda y Alemania", dijo.
"Así que en realidad es una epidemia en nuestra industria. Todo esto ha sucedido porque la gente aprendió a conseguir dinero fácil trabajando fuera de sus casas, y ahora hay menos gente que quiera venir a hacer los trabajos que estaban haciendo", dijo Al Baker.
"Todo esto ha supuesto un gran impacto en los aeropuertos, en toda Europa, y por supuesto Heathrow es uno de los mayores centros de operaciones de Europa".
Los sindicatos británicos han acusado a las aerolíneas y a los aeropuertos de aprovechar la oportunidad de la pandemia para recortar puestos de trabajo y salarios. Mientras tanto, las aerolíneas y los aeropuertos se acusan mutuamente de no haberse preparado adecuadamente para un aumento de la demanda de viajes tras la pandemia.
Según datos recientes, en Gran Bretaña hay 400.000 trabajadores menos que al comienzo de la pandemia.
