El sábado se reunió en Islamabad por primera vez un organismo de alto nivel creado para coordinar los esfuerzos de socorro, presidido por el primer ministro Shehbaz Sharif, para hacer un balance de la catástrofe.

Las lluvias monzónicas récord y el deshielo de los glaciares en las montañas del norte provocaron inundaciones que han afectado a 33 millones de personas y han causado la muerte de al menos 1.265 personas, entre ellas 441 niños. Las inundaciones, atribuidas al cambio climático, siguen extendiéndose.

La proporción de muertes de niños ha suscitado preocupación. El viernes, la agencia de las Naciones Unidas para la infancia (UNICEF) dijo que existía el riesgo de que se produjeran "muchas más" muertes de niños por enfermedades tras las inundaciones.

Las inundaciones que han anegado un tercio del país fueron precedidas por cuatro olas de calor y por múltiples incendios forestales, dijo el jefe de gestión de desastres en la reunión de alto nivel, destacando los efectos del cambio climático en la nación del sur de Asia.

"El año 2022 trajo consigo algunas duras realidades del cambio climático para Pakistán", dijo el jefe de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres, el teniente general Akhtar Nawaz, en una reunión informativa para los altos dirigentes del país.

"Este año no hemos sido testigos de una estación primaveral, sino que nos hemos enfrentado a cuatro olas de calor que han provocado incendios forestales a gran escala en todo el país", dijo.

Los incendios fueron especialmente graves en la provincia suroccidental de Baluchistán, destruyendo franjas de bosques de pinos y otra vegetación, no muy lejos de las zonas ahora sumergidas.

Este monzón, Baluchistán ha recibido un 436% más de lluvia que la media de los últimos 30 años.

La provincia ha sido testigo de una devastación generalizada, que incluye el arrastre de redes ferroviarias y de carreteras clave, así como averías en las infraestructuras de telecomunicaciones y eléctricas, según se informó en la reunión.

El país ha recibido casi un 190% más de lluvia que la media de 30 años en el trimestre hasta agosto, con un total de 390,7 milímetros (15,38 pulgadas). La provincia de Sindh, con una población de 50 millones de habitantes, fue la más afectada, ya que recibió un 464% más de lluvia que la media de 30 años.

La ayuda ha llegado de varios países, y el primer vuelo de ayuda humanitaria procedente de Francia aterrizó el sábado por la mañana en Islamabad. Pero el mayor grupo benéfico de Pakistán ha dicho que todavía hay millones de personas a las que no han llegado los esfuerzos de ayuda y socorro.

Las primeras estimaciones de los daños se han cifrado en 10.000 millones de dólares, pero todavía se están realizando estudios junto con las organizaciones internacionales.

Las Naciones Unidas han solicitado 160 millones de dólares de ayuda para hacer frente a lo que, según ellas, es una "catástrofe climática sin precedentes", mientras la marina de Pakistán se ha desplegado tierra adentro para llevar a cabo operaciones de socorro en zonas que parecen un mar.