Pemex ha procesado un promedio de 821.233 bpd de crudo al mes este año en sus seis refinerías nacionales, por encima del promedio del año pasado de 815.790 bpd.
Si bien Pemex ha impulsado el procesamiento desde mínimos cercanos a 600.000 por mes al inicio del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en 2018, sigue lejos de producir suficiente diesel y gas para satisfacer las necesidades de México y continúa importando grandes volúmenes.
Los resultados de la petrolera el mes pasado proyectaron una capacidad total de 1.109 millones de bpd, además de sus operaciones de refinación en Deer Park, Texas.
El gobierno espera aumentar esta cifra con las aportaciones de su nueva refinería Olmeca en el puerto de Dos Bocas, en la costa del Golfo, que aún no ha entrado plenamente en funcionamiento a pesar de su inauguración el año pasado.
Reducir la prolongada dependencia de las importaciones de combustible ha sido un objetivo clave de la presidencia de López Obrador, que concluye el próximo año.
Pemex importó 317.879 bpd de gasolina y 142.167 bpd de diesel en julio, frente a una producción nacional de 265.771 bpd de gasolina y 153.553 bpd de diesel. También importó 498.561 millones de pies cúbicos diarios de gas natural seco.
La producción total de crudo de Pemex fue de 1,573 millones de bpd en julio, el nivel más bajo de este año. La producción de 282.000 bpd de condensados, que ha ido subiendo desde diciembre, ayudó a situar la producción total de hidrocarburos en torno a 1,8 millones de bpd.
Mientras tanto, las exportaciones de crudo cayeron un 13% en julio desde los máximos del año registrados en junio, con una media de 1,05 millones de bpd.
A principios de julio, Reuters informó de que Pemex tendría una pérdida de producción de crudo de unos 100.000 bpd tras un incendio masivo en una plataforma en alta mar. La empresa dijo a finales de ese mes que había logrado restablecer la producción al 98%. (Reportaje de Ana Isabel Martínez; Redacción de Brendan O'Boyle; Edición de Paul Simao)
