El dólar se debilitó un 1,01% a 146,31 frente a la divisa japonesa, después de haber caído anteriormente alrededor de un 1,3% a 145,89, su nivel más bajo desde el 1 de septiembre, tras los comentarios del fin de semana de Ueda en los que afirmaba que el BOJ podría poner fin a su política de tipos de interés negativos si se determina que se puede alcanzar el objetivo de inflación.
El dólar se suavizó antes de los datos de inflación de EE.UU. que se publicarán el miércoles, y se espera que la Reserva Federal haga una pausa en sus subidas de los tipos de interés en su reunión de política monetaria de la semana que viene, aunque sigue habiendo sobre la mesa subidas adicionales para este año en caso de que los datos indiquen que la economía y la inflación no se están enfriando lo suficientemente rápido.
"Parece que, aunque señalan que podrían estar más cerca de abandonar los tipos negativos a finales de año si se produce un cambio importante, todavía nos queda un largo camino por recorrer", dijo Edward Moya, analista senior de mercado de Oanda en Nueva York sobre los comentarios de Ueda.
"Siguiendo algunas de las intervenciones anteriores del Banco de Japón, no quieren malgastar su munición cuando la otra parte de la operación, impulsada por la economía estadounidense, podría verse trastocada. Por eso han tenido que recurrir a la intervención verbal de nuevo".
Las expectativas de que la Fed mantenga estables los tipos la próxima semana se sitúan en el 93%, según la herramienta FedWatch de CME, con cerca del 39% de posibilidades de una subida de 25 puntos básicos para la reunión de noviembre.
Aparte de los datos sobre los precios al consumo que se publicarán el miércoles, los inversores también conocerán el jueves las cifras de los precios a la producción y las ventas minoristas.
El yen se ha visto presionado frente al dólar, ya que el Banco de Japón sigue siendo un caso atípico de dovish entre los bancos centrales mundiales, especialmente desde que la Reserva Federal comenzó su agresivo ciclo de subidas de tipos el año pasado.
Los operadores han estado muy atentos a cualquier signo de intervención por parte de Japón para apuntalar el yen desde que se debilitó por encima del umbral de 145 por dólar el mes pasado. Hace un año, ese nivel dio lugar a la primera intervención compradora de yenes por parte de las autoridades desde 1998.
El índice dólar, que mide la divisa estadounidense frente a sus homólogas, incluido el yen, bajó por última vez un 0,32% hasta 104,51, tras caer hasta 104,41, su nivel más bajo desde el 5 de septiembre. El dólar ha subido durante ocho semanas consecutivas.
Frente a un dólar más débil, la libra esterlina ganó un 0,5% hasta 1,2527 $, continuando su recuperación desde el mínimo de tres meses de 1,2445 $ alcanzado la semana pasada. El euro ganó un 0,43% hasta 1,0745 $.
