Hasta la fecha, Alemania ha aportado unos 26.000 millones de euros en inyecciones de capital y préstamos a Sefe y Uniper, después de que sufrieran pérdidas récord comprando cargamentos de gas natural a alto precio para sustituir los suministros perdidos de Rusia, el principal proveedor de gas de Alemania antes de la invasión de Ucrania.
 
Aunque el pago de primas a los grupos energéticos rescatados suscita dudas sobre el uso del dinero de los contribuyentes, también pone de relieve la necesidad de que las empresas sigan siendo competitivas.
 
Sefe (abreviatura de Securing Energy for Europe) y Uniper tuvieron que aceptar limitar los salarios de sus consejos de administración como parte de los rescates, pero el límite a las primas no se aplica a todo el personal. Una fuente dijo que 200 operadores de Sefe en Londres habían recibido cientos de millones de dólares en primas, y añadió que los operadores de nivel medio habían recibido entre 5 y 7 millones de dólares cada uno. Otras dos personas dijeron que se habían pagado generosas subvenciones tanto a Sefe como a Uniper.
"Seguir siendo competitivos"
Sefe, la antigua división alemana del grupo ruso Gazprom, dijo que el rendimiento de sus empleados merecía una compensación por su contribución a la seguridad del suministro, sin dar más detalles.
 
"Esto permite a Sefe seguir siendo competitiva en el mercado de recursos humanos para poder suministrar gas e hidrógeno al mercado alemán en el futuro", dijo la empresa en comentarios enviados por correo electrónico, añadiendo que los costes totales de personal para 2021, el último año para el que se dispone de información, ascendieron a 330 millones de euros.
 
Uniper confirmó que se habían pagado primas al personal comercial para 2022, pero que estaban por debajo del nivel del año anterior. "La competencia para los traders en el sector energético es intensa. Por lo tanto, una prima cero no es apropiada", dijo la empresa.
La competencia para los operadores es actualmente feroz, con rivales como Vitol y Trafigura que declaran miles de millones de dólares de beneficios anuales, aprovechando la extrema volatilidad de los precios tras la invasión rusa de su país vecino. Los operadores suelen cobrar en función de un porcentaje de los beneficios que obtienen de su cartera de negociación, y no es raro que ganen más que el consejero delegado de una empresa. Bernard Looney, consejero delegado de BP, por ejemplo, ganó 12 millones de dólares el año pasado.
 
El Ministerio de Economía alemán, que supervisa la participación de Berlín en Sefe, dijo que las condiciones establecidas por la Comisión Europea eran decisivas en materia de remuneración, y añadió que sólo la empresa podía comentar cómo se cumplían esas condiciones.
 
El Ministerio de Hacienda, responsable de la participación estatal en Uniper, también remitió a la empresa las cuestiones operativas, incluida la remuneración del personal. La división comercial de Sefe, con sede en Londres, emplea a unas 830 personas, según el sitio web del grupo, mientras que el segmento comercial global de Uniper cuenta con unos 1.400 empleados.