La financiación es el primer tramo de los 5.000 millones de dólares que la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) repartirá a lo largo de cinco años a través de un programa de autobuses escolares limpios creado por la Ley Bipartidista de Infraestructuras en 2021.
Los premios apoyarán la compra de 2.463 autobuses, el 95% de los cuales serán eléctricos, según la Casa Blanca. Los casi 400 reembolsos se destinarán a los distritos escolares de los 50 estados.
El programa de autobuses escolares limpios de la EPA forma parte de un impulso más amplio de la administración para mejorar la infraestructura de las escuelas públicas y reducir la contaminación de los autobuses viejos. También ayuda a cumplir las promesas del presidente de EE.UU., Joe Biden, de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y canalizar las inversiones federales hacia las comunidades desatendidas.
La transición a una flota de autobuses escolares eléctricos en todo el país reduciría las emisiones de gases de efecto invernadero en 5,3 millones de toneladas al año, según un estudio realizado por la organización sin ánimo de lucro Public Interest Research Group. Eso es más o menos lo mismo que desconectar una central de carbón y media durante un año, según una calculadora de la EPA.
El mes pasado, la EPA dijo que casi duplicaría los 500 millones de dólares que tenía previstos en subvenciones para autobuses limpios para este año debido a la abrumadora demanda de los distritos escolares. Tiene previsto desembolsar otros 1.000 millones de dólares en el marco del programa el año que viene.
