Washington está argumentando a las naciones de la OPEP+ que los fundamentos económicos no apoyan un recorte de la producción, dijo la fuente.
La OPEP+, que incluye a Arabia Saudí y Rusia, está trabajando en recortes superiores a 1 millón de barriles diarios, según dijeron fuentes a Reuters esta semana. Los recortes podrían impulsar una recuperación de los precios del petróleo.
La Casa Blanca declinó hacer comentarios.
"No vamos a comentar ninguna acción de la OPEP hasta que ésta actúe", dijo Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
"Por supuesto, siempre hablamos con todos los productores y consumidores, incluidos los socios de la OPEP+. Así ha sido durante décadas y a través de administraciones bipartidistas, incluida ésta. Hemos tenido claro que la oferta de energía debe satisfacer la demanda para apoyar el crecimiento económico y bajar los precios para los consumidores de todo el mundo y seguiremos hablando con nuestros socios sobre eso", dijo.
Biden lleva todo el año lidiando con los precios de la gasolina. Tras un repunte, han bajado gradualmente y su administración lo ha promocionado como un gran logro.
Un aumento de los precios podría perjudicar las perspectivas demócratas en las elecciones legislativas de mitad de período del 8 de noviembre.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, conocidos como OPEP+, parecen dispuestos a recortar la producción cuando se reúnan el miércoles.
La medida reduciría la oferta en un mercado petrolero que, según los ejecutivos de las empresas energéticas y los analistas, ya está muy ajustado debido a la saludable demanda, la falta de inversiones y los problemas de suministro.