Francia, Italia, Polonia y otros 12 países escribieron esta semana a la Comisión Europea para pedirle que proponga un tope de precios en toda la UE para las transacciones de gas al por mayor con el fin de ayudar a frenar la creciente inflación.

Otros países se oponen -entre ellos Alemania, el mayor comprador de gas de Europa, y los Países Bajos- y no está claro si habría suficiente apoyo entre los países para aprobar cualquier propuesta.

La Comisión Europea también ha planteado sus dudas y ha sugerido que la UE siga adelante con versiones más limitadas de un tope de precios.

He aquí las distintas formas en que Europa podría limitar el precio del gas.

LIMITACIÓN DEL PRECIO DE TODO EL GAS

Esto es lo que los 15 países de la UE pidieron a la Comisión Europea que propusiera urgentemente. "Este tope de precios... es la única medida que ayudará a todos los Estados miembros a mitigar la presión inflacionista", afirmaron.

La Comisión se muestra escéptica. En un documento en el que analizaba el miércoles varias opciones para domar los precios del gas, el Ejecutivo comunitario afirmaba que un tope amplio de los precios del gas podría ser complejo de poner en marcha y plantear riesgos para la seguridad energética, argumentos que también esgrimen países recelosos como Alemania.

La Comisión afirmó que un tope de precios al por mayor para las transacciones de intercambio -que abarque tanto el gas natural licuado como el suministro por gasoducto- podría interrumpir los flujos de combustible entre los países de la UE.

Esto se debe a que, en caso de escasez de suministro, las señales de precios ya no podrían impulsar los flujos hacia las regiones que necesitan gas con urgencia. La Comisión sugirió que un tope de este tipo sólo podría funcionar si se pusiera en marcha una nueva entidad para asignar y enviar los escasos suministros de combustible entre los Estados.

La UE también necesitaría "importantes recursos financieros" para garantizar que los países pudieran seguir atrayendo suministros de gas de los competitivos mercados mundiales, donde otros compradores podrían estar dispuestos a pagar precios superiores al tope de la UE, dijo la Comisión, añadiendo que la medida podría arriesgarse a "desencadenar interrupciones del suministro" de proveedores extranjeros.

TOPE DE PRECIOS PARA EL GAS RUSO

"Creo firmemente que necesitamos un tope de precios para todas las importaciones de gas ruso", declaró el jueves el comisario de Energía de la UE, Kadri Simson.

La Comisión sugirió un tope al precio del gas ruso a principios de este mes, pero archivó la idea tras la resistencia de los países de Europa central y oriental, preocupados por que Moscú tomara represalias cortando el resto del gas que aún les envía.

Europa dependía de Rusia para aproximadamente el 40% de su gas antes de que Moscú invadiera Ucrania. Esa cuota se ha reducido al 9%, ya que Rusia ha recortado desde entonces los suministros a Europa.

Dados los bajos volúmenes que Moscú envía ahora, algunos diplomáticos de la UE dijeron que un tope de precios haría poco por reducir los precios europeos del gas, y funcionaría más como un movimiento geopolítico para recortar los ingresos a Moscú.

LÍMITE DE PRECIOS PARA EL GAS DESTINADO A LA ELECTRICIDAD

La Comisión dijo que también estaría dispuesta a introducir un tope de precios en la UE específicamente para el gas utilizado para la generación de electricidad.

Los precios europeos de la electricidad los fija la última central eléctrica necesaria para satisfacer la demanda: normalmente, una central de gas. Por tanto, reducir el coste de la electricidad generada con gas podría hacer bajar el precio global de la electricidad, aunque los gobiernos tendrían que compensar a las centrales de gas por la diferencia entre el precio tope y el precio de mercado más alto al que compran el combustible.

España y Portugal pusieron en marcha un plan en este sentido en junio, que ha contribuido a bajar los precios locales de la electricidad, pero que también ha coincidido con un aumento del consumo de gas en España.

La Comisión ha dicho que cualquier intervención para bajar los precios del gas debe ir acompañada de medidas para evitar un aumento de la demanda de gas, en un momento en que los países se esfuerzan por ahorrar el escaso combustible.

NUEVO PRECIO DE REFERENCIA DEL GAS

La UE también está trabajando en un precio de referencia alternativo para el gas natural licuado, que los países europeos se apresuran a comprar en los mercados internacionales para sustituir al gas ruso.

Históricamente, el precio del gas en el centro de transferencia de títulos (TTF) de los Países Bajos se ha utilizado como precio de referencia para las entregas de GNL a Europa.

Pero una importante reducción de los suministros de gas ruso ha hecho que el precio del TTF sea extremadamente volátil y más caro que los precios del GNL en otras regiones.

Fuentes del sector afirman que el mercado de la UE necesita un precio que refleje la oferta y la demanda reales de GNL, aunque algunos sugirieron que la industria debería desarrollar un nuevo punto de referencia por su cuenta.

El éxito del punto de referencia dependería de si la industria empieza a utilizarlo.

"Un nuevo punto de referencia del GNL basado en las transacciones, basado en evaluaciones de precios objetivamente verificables para las entregas de cargamentos, proporcionaría un valioso punto de referencia para los participantes en el mercado que se utilizaría de forma voluntaria", afirma la Comisión en su documento.

PRÓXIMOS PASOS

Los ministros de Energía de los países de la UE debatirán los posibles topes de los precios del gas en una reunión que se celebrará el viernes. A continuación, la Comisión, que elabora las políticas de la UE, dará a conocer el mes que viene los detalles de las medidas adicionales que está estudiando para hacer frente a la crisis energética.

Una vez que la Comisión presente las propuestas, los 27 países del bloque las negociarán e intentarán llegar a un acuerdo final. Además de los topes de precios, Bruselas está planeando medidas que incluyen el apoyo de liquidez de emergencia a las empresas energéticas.