Fitch rebajó el martes la calificación soberana de Rusia en seis escalones más hacia el territorio de la chatarra, hasta "C" desde "B", afirmando que un impago es inminente, ya que las sanciones y las restricciones comerciales han socavado su voluntad de servir la deuda.

Los mercados financieros del país se han visto sumidos en la confusión por las sanciones occidentales después de que invadiera Ucrania, lo que ha suscitado importantes preocupaciones sobre su capacidad y voluntad de servir la deuda.

La empresa de calificación señaló el decreto presidencial, que podría obligar a redenominar los pagos de la deuda soberana en moneda extranjera a la moneda local para los acreedores de determinados países.

"La intensificación de las sanciones y las propuestas que podrían limitar el comercio de energía aumentan la probabilidad de una respuesta política por parte de Rusia que incluya al menos el impago selectivo de sus obligaciones de deuda soberana", dijo la agencia de calificación en un comunicado.

El 16 de marzo, Rusia debe pagar 107 millones de dólares en cupones de dos bonos, aunque tiene un periodo de gracia de 30 días para realizar los pagos.

La calificación "C" en la evaluación de Fitch está sólo un escalón por encima del impago, lo que la sitúa en línea con la actual nota equivalente de Moody's, "Ca".

El cambio se produce menos de una semana después de que Fitch revocara el estatus de grado de inversión de Rusia, rebajando su calificación a "B" desde "BBB". Sus pares Moody's y S&P también habían rebajado sus calificaciones soberanas. (Información de Taru Jain en Bengaluru; edición de Arun Koyyur)