"Si Rusia se preocupara por la situación humanitaria, dejaría de bombardear a los niños y pondría fin a sus tácticas de asedio. Pero no lo han hecho", dijo la embajadora británica en la ONU, Barbara Woodward, al consejo después de la votación. Rusia niega haber atacado a los civiles.

Una resolución del Consejo de Seguridad necesita al menos nueve votos a favor y ningún veto de Rusia, China, Gran Bretaña, Francia o Estados Unidos para ser adoptada. El embajador ruso en la ONU, Vassily Nebenzia, acusó a los que se abstuvieron el miércoles de hacerlo "por razones políticas".

Al explicar el voto afirmativo de China, el embajador Zhang Jun dijo que Pekín tenía una "fuerte expectativa" de que se produjera un alto el fuego inmediato, pero que al mismo tiempo que presionaba para que se detuvieran los combates, el consejo debía "responder también a la crisis humanitaria de forma positiva, pragmática y constructiva."

China se abstuvo el mes pasado en una votación del Consejo de Seguridad sobre un proyecto de resolución que habría deplorado la invasión de Ucrania por parte de Moscú el 24 de febrero, una medida que los países occidentales consideraron una victoria para mostrar el aislamiento de Rusia. Rusia vetó la resolución.

Moscú había desechado una votación prevista en el Consejo sobre el proyecto de resolución de ayuda el pasado viernes tras acusar a los países occidentales de una campaña de "presión sin precedentes" contra la medida. Estados Unidos rechazó la acusación de Rusia.

"Rusia es la única culpable de la guerra en Ucrania", dijo el miércoles la embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, ante el Consejo. "Los esfuerzos poco sinceros de Rusia por negar la verdad de sus acciones seguirán fracasando".

El pulso diplomático se ha intensificado desde que Rusia lanzó lo que llama una "operación militar especial" que, según dice, tiene como objetivo destruir la infraestructura militar de Ucrania. El jefe de la ONU, Antonio Guterres, ha criticado la "guerra absurda" de Rusia.

RESPONSABILIDAD

Rusia propuso el texto del Consejo de Seguridad después de que Francia y México retiraran su propio impulso a una resolución del Consejo sobre la situación humanitaria de Ucrania porque dijeron que habría sido vetada por Moscú. Ese proyecto habría criticado a Rusia por su papel en la creación de la situación humanitaria en Ucrania.

Ucrania y sus aliados planean, en cambio, someter a votación esta semana un proyecto de resolución similar en la Asamblea General de 193 miembros, donde ningún país tiene derecho a veto. Las resoluciones de la Asamblea General no son vinculantes, pero tienen peso político.

Thomas-Greenfield se dirigió a la Asamblea General el miércoles: "Una abstención ante las atrocidades de Rusia es inaceptable. Rusia debe rendir cuentas por la crisis humanitaria que está creando".

Sudáfrica ha presentado un proyecto de texto rival en la Asamblea General sobre la misma cuestión que no menciona a Rusia.

El borrador liderado por Ucrania cuenta actualmente con 88 copatrocinadores y el de Sudáfrica tiene unos seis, entre ellos China, dijeron los diplomáticos.

Nebenzia acusó a Ucrania y a sus aliados el miércoles de "otro espectáculo político antirruso" en la Asamblea General, e instó a los países a votar a favor del proyecto sudafricano, diciendo que "enviaría una señal a la población pacífica de Ucrania de que las Naciones Unidas son conscientes de su situación y quieren ayudar".

El embajador de Ucrania en la ONU, Sergiy Kyslytsya, hizo un llamamiento a la Asamblea General de la ONU: "Pedimos a todos los que están en contra de la guerra que voten con nosotros".

Ucrania y sus aliados pretenden mejorar los 141 votos afirmativos emitidos para aprobar una resolución de la Asamblea General del 2 de marzo que deploraba la "agresión" de Rusia contra Ucrania y exigía su retirada. Rusia, Bielorrusia, Eritrea, Corea del Norte y Siria votaron no, mientras que 35 estados -incluida China- se abstuvieron.