Las agencias de inteligencia occidentales han estado investigando el ataque que interrumpió el acceso a Internet de banda ancha por satélite proporcionado por la empresa de telecomunicaciones estadounidense Viasat, según informó Reuters la semana pasada.

"Ciertamente es algo que estamos investigando de forma bastante activa -más que bastante en realidad", dijo un funcionario británico a los periodistas el viernes. "Hemos estado hablando extensamente con las organizaciones del Reino Unido para darles una idea de cómo podemos asesorarles en ese punto".

Los piratas informáticos no identificados inutilizaron decenas de miles de módems que se comunican con el satélite KA-SAT de Viasat Inc, que suministra Internet a algunos clientes en Europa, incluso en Ucrania.

A última hora del jueves, la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de las Infraestructuras de Estados Unidos (CISA) y la Oficina Federal de Investigación (FBI) emitieron un comunicado conjunto en el que advertían de las "posibles amenazas a las redes de comunicación por satélite (SATCOM) estadounidenses e internacionales" tras el ataque.

Los proveedores de redes SATCOM y los clientes deben aumentar su seguridad e informar de cualquier actividad maliciosa dada la "actual situación geopolítica", según el comunicado.

La organización gubernamental francesa de ciberseguridad ANSSI y la inteligencia ucraniana están evaluando si el sabotaje a distancia fue obra de piratas informáticos respaldados por el Estado ruso que preparan el campo de batalla intentando cortar las comunicaciones, informó Reuters.

Las tropas rusas han sufrido grandes pérdidas al arrasar zonas residenciales en Ucrania hasta convertirlas en escombros, lo que ha provocado la huida de más de 3 millones de refugiados. Moscú niega que esté atacando a los civiles en lo que llama una "operación especial" para desarmar a su vecino.

El bombardeo digital del servicio de satélites comenzó el 24 de febrero entre las 5 y las 9 de la mañana, el día en que las fuerzas rusas lanzaron su invasión.

"Si se atribuyera finalmente a Rusia, encajaría muy bien en lo que esperamos que hagan, que es utilizar sus capacidades cibernéticas para apoyar, en última instancia, su campaña militar", dijo el funcionario británico.