El príncipe, que el martes se convirtió en el primer miembro de la realeza británica de alto rango en comparecer en un estrado como testigo en más de un siglo, afirmó que la prensa había destruido sus relaciones y que creía que los medios de comunicación británicos y su gobierno habían tocado "fondo".

El martes se enfrentó a casi cinco horas de interrogatorio por parte de Andrew Green, el abogado de Mirror Group Newspapers (MGN), el editor del Daily Mirror, Sunday Mirror y Sunday People, al que él y otras 100 personas han demandado por acusaciones de recopilación ilegal de información generalizada entre 1991 y 2011.

En una declaración testimonial escrita de 50 páginas y en el interrogatorio, dijo que la prensa tenía las manos manchadas de sangre, destruyó su adolescencia, arruinó las relaciones con amigos y novias y sembró la paranoia y la desconfianza desde 1996, cuando era un escolar.

Su enfado por las insinuaciones de que su madre, la princesa Diana, fue víctima de pirateo telefónico antes de su muerte en 1997 también fue evidente.

"He experimentado la hostilidad de la prensa desde que nací", dijo, calificando el comportamiento de "vil".

Harry, el primer miembro de alto rango de la realeza británica que presta declaración desde hace 130 años, parecía relajado pero hablaba con firmeza, mientras Green le interrogaba detalladamente sobre 33 artículos periodísticos, cuyos detalles Harry afirma que se obtuvieron ilegalmente.

En varias ocasiones, Green calificó las acusaciones del príncipe de "especulación total".

Harry y su esposa estadounidense Meghan abandonaron sus obligaciones reales en 2020, y la intromisión de la prensa se citó como un factor clave en su decisión de trasladarse a Estados Unidos.

Desde entonces han cortado la colaboración con los principales tabloides británicos, a muchos de los cuales han demandado o están demandando en casos similares.

Algunos de los tabloides reaccionaron con cinismo a la actuación de Harry ante el tribunal.

"¡Harry debe de haber añorado el abrazo sensiblero de Oprah!" fue la portada del Daily Mail, en referencia a la entrevista que la pareja concedió en 2021 a Oprah Winfrey.

MGN, ahora propiedad de Reach, ha admitido anteriormente que sus cabeceras estuvieron implicadas en el pirateo telefónico, llegando a un acuerdo en más de 600 demandas, pero Green ha dicho que no había pruebas de que Harry hubiera sido víctima.

Argumentó que parte de la información personal había procedido de altos ayudantes del Palacio de Buckingham o se había facilitado con su consentimiento.

Harry y los demás demandantes, sin embargo, argumentan durante el juicio de siete semanas que los editores y ejecutivos de alto rango de MGN conocían y aprobaban el comportamiento ilícito.