"El hecho de que el Reino Unido fuera la economía de más rápido crecimiento del G7 el año pasado, además de evitar una recesión, demuestra que nuestra economía es más resistente de lo que muchos temían", declaró Hunt en un comunicado.

"Sin embargo, aún no estamos fuera (de) peligro, sobre todo en lo que se refiere a la inflación".