El país, rico en recursos, había planeado prohibir las exportaciones de todos los minerales metálicos para fomentar la inversión en la industria nacional de transformación.
Pero se permitirán las exportaciones de cobre, mineral de hierro, plomo, zinc y lodo anódico de concentrados de cobre hasta que las fundiciones, muchas de las cuales sufrieron retrasos a causa de la pandemia, estén listas para manipular los materiales, declaró el ministro de Energía y Recursos Minerales, Arifin Tasrif.
Dijo que prohibir los envíos de estos materiales prematuramente costaría al país ingresos y puestos de trabajo.
Se permitirá a las empresas seguir exportando siempre que sus fundiciones alcancen el 50% de acabado a partir de enero, dijo Arifin, y se les exigirá el pago de derechos de exportación.
Yakarta ha dicho que eximirá de la prohibición a las mineras de cobre Freeport Indonesia y Amman Mineral Nusa Tenggara, ya que el desarrollo de sus fundiciones también se vio retrasado por la pandemia.
Sin embargo, los envíos de bauxita se detendrán en junio, según Arifin, ya que cuatro fundiciones existentes pueden absorber los minerales destinados a la exportación.
"Optimizando el procesamiento en estas cuatro fundiciones seguiría habiendo un valor de exportación adicional de 1.900 millones de dólares... por lo que el gobierno seguiría obteniendo un beneficio neto", dijo.
También señaló que de las ocho plantas de procesamiento de bauxita que se están construyendo actualmente, siete se encontraban "sólo en campo abierto" a pesar de que los informes de progreso de las empresas decían que estaban terminadas hasta en un 66%.
Indonesia prohibió en 2020 las exportaciones de mineral de níquel, lo que sacudió los mercados mundiales. Pero la prohibición dio lugar a una afluencia masiva de inversiones en fundiciones y contribuyó a aumentar el valor de las exportaciones de la mayor economía del sudeste asiático.
