Suzuki, en declaraciones a los periodistas, se negó a comentar cuando se le preguntó si las autoridades están llevando a cabo una intervención furtiva para apoyar el debilitamiento de la moneda.

"No podemos tolerar movimientos excesivos de la divisa impulsados por los especuladores", dijo Suzuki.

"Estamos vigilando de cerca los movimientos de la moneda con un sentido de urgencia".

Japón gastó 2,8 billones de yenes (18.810 millones de dólares) en intervenciones de venta de dólares y compra de yenes el mes pasado, cuando las autoridades intervinieron para apuntalar el yen por primera vez desde 1998.

Se especula con la posibilidad de que las autoridades japonesas hayan intervenido en el mercado desde entonces sin anunciarlo, pero Suzuki declinó hacer comentarios.

"En general, hay momentos en los que intervenimos haciendo un anuncio y otros en los que lo hacemos sin él", dijo Suzuki, declinando hacer más comentarios.

(1 dólar = 148,8400 yenes)