El dictamen de la Comisión forma parte de un proceso formal en la UE según el cual el ejecutivo comunitario comprueba cada año si los proyectos de presupuesto de los países de la zona euro para el año siguiente se ajustan a las normas de la UE.

Si se considera que el proyecto de presupuesto incumple las normas, la Comisión puede devolverlo y solicitar uno nuevo.

"En conjunto, el proyecto de plan presupuestario actualizado de Italia se ajusta a las recomendaciones del Consejo de julio de 2022: Italia limita el crecimiento del gasto corriente primario financiado a nivel nacional y prevé financiar la inversión pública para las transiciones ecológica y digital, y para la seguridad energética", declaró la Comisión.

"La Comisión también opina que Italia aún no ha avanzado en lo que respecta a la parte estructural de las recomendaciones fiscales..., que exigían que Italia adoptara y aplicara adecuadamente la ley de habilitación de la reforma fiscal

para reducir aún más los impuestos sobre el trabajo y aumentar la eficacia del sistema fiscal", señala el comunicado de la Comisión.

"Además, el proyecto de plan presupuestario actualizado de Italia incluye medidas que no son coherentes con la parte estructural de las anteriores recomendaciones fiscales, concretamente en el ámbito de las pensiones y la evasión fiscal, incluso sobre el uso obligatorio de los pagos electrónicos y los umbrales legales para los pagos en efectivo", añade.