En un discurso a la salida de su despacho y residencia en Downing Street, Truss dijo que la reina había sido "una inspiración personal para mí y para muchos británicos".

"La reina Isabel II fue la roca sobre la que se construyó la Gran Bretaña moderna. Nuestro país ha crecido y florecido bajo su reinado. Gran Bretaña es el gran país que es hoy gracias a ella", dijo.