Ucrania, una antigua república soviética que ha intentado unirse a la UE y a la OTAN, ha pedido una adhesión rápida a la UE desde la invasión del 24 de febrero.
"Entiendo muy bien que, cuando se lucha con valentía como lo hace Ucrania, se quiera mucho más. Pero no somos un bando en este conflicto", dijo el presidente francés Emmanuel Macron en una conferencia de prensa.
El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo que era "correcto" entregar la solicitud de Ucrania, así como la de Moldavia y Georgia, para una posible adhesión a la Comisión Europea, órgano ejecutivo del bloque, para un análisis jurídico detallado.
Los aliados de Ucrania en el este de Europa se mostraron decepcionados.
"Me gustaría que Ucrania obtuviera ya el estatus de candidato... hoy no ha sido posible, pero volveremos a tratar este tema", dijo el presidente lituano Gitanas Nauseda.
Los países de la UE deben ponerse de acuerdo por unanimidad para dejar entrar a un nuevo miembro y la adhesión suele llevar años de complejas negociaciones, además de exigir a los candidatos que cumplan estrictos criterios, desde la estabilidad económica hasta la erradicación de la corrupción y el respeto de los derechos humanos.
El máximo diplomático del bloque, Josep Borrell, dijo que la UE podría ofrecer otros 500 millones de euros (550 millones de dólares) a Ucrania para comprar armas. El bloque también prometió ayudar a reconstruir el país de 44 millones de habitantes una vez que termine la guerra.
SANCIONES
La UE también amenazó con más sanciones a Moscú.
"Nada está fuera de la mesa, nada es tabú, haremos lo que consideremos necesario para detener a Rusia", dijo Macron tras las conversaciones en el palacio de Versalles, cerca de París.
Scholz lo confirmó: "Acordamos seguir impulsando las sanciones que tienen un efecto inmediato sobre las posibilidades de desarrollo económico de Rusia".
Al igual que la ampliación de la UE, las sanciones requieren la unanimidad de todos los países miembros. Los 27 miembros aún no han encontrado un terreno común sobre cuánto avanzar en el corte de los lazos comerciales con Rusia.
Como siguiente paso, Occidente estaba frenando los derechos de Rusia en la Organización Mundial del Comercio.
Los líderes también se volvieron hacia el interior para discutir formas de reducir su exposición económica a Moscú. Decidieron reducir las importaciones de energía rusa para 2027, gastar más en defensa y aumentar la producción propia de alimentos.(1$ = 0,9137 euros)
