El índice de gestores de compras (PMI) de servicios Caixin/S&P Global cayó a 51,8 en agosto desde los 54,1 de julio, la lectura más baja desde diciembre, cuando el COVID-19 confinó a muchos consumidores en sus hogares. La marca de 50 puntos separa la expansión de la contracción de la actividad.
Los datos coincidieron en líneas generales con el PMI de servicios oficial publicado la semana pasada, que mostró que el sector seguía tendiendo a la baja. Ni siquiera el número récord de viajes de pasajeros por ferrocarril y los ingresos estelares en taquilla durante el verano consiguieron hacer subir la lectura.
Aunque tanto el PMI manufacturero oficial como el Caixin superaron las expectativas del mercado y mostraron un aumento de julio a agosto, el debilitamiento de la actividad de los servicios sigue pesando sobre la economía en medio de la atonía de la demanda y el declive inmobiliario.
El PMI compuesto de Caixin/S&P, que incluye tanto la actividad manufacturera como la de servicios, bajó hasta 51,7 desde los 51,9 de julio, lo que supone el octavo mes consecutivo de expansión, aunque el más débil desde enero.
"La ralentización marginal de la expansión de la oferta y la demanda del sector servicios contrarrestó la mejora de la producción y la demanda manufactureras", declaró Wang Zhe, economista de Caixin Insight Group, y añadió que "aún existía una considerable presión a la baja sobre la economía."
Pekín ha lanzado una serie de medidas en los últimos meses para reavivar la ralentización del crecimiento, y el banco central y el principal regulador financiero suavizaron la semana pasada algunas normas de endeudamiento para ayudar a los compradores de viviendas. Pero los analistas advierten de que estas medidas pueden tener dificultades para mover la aguja en medio de la ralentización de la recuperación del mercado laboral y las inciertas expectativas de ingresos de los hogares.
El aumento de los nuevos pedidos en el sector servicios se situó por debajo de la media observada en 2023 hasta la fecha, debido en parte a una demanda exterior más débil, según el PMI de servicios Caixin.
Los nuevos negocios de exportación cayeron por primera vez desde diciembre en medio de la atonía de las condiciones en el extranjero.
La confianza empresarial para las perspectivas a 12 meses alcanzó su nivel más bajo en nueve meses.
Aunque el impulso del crecimiento se ralentizó, las empresas siguieron incorporando personal el mes pasado debido al aumento de las necesidades empresariales y a los planes de ampliación de la capacidad.
Mientras tanto, los negocios pendientes se acumularon aún más, con una tasa que se elevó a la más alta desde enero.
En el frente de los precios, la tasa de inflación de los costes de los insumos se enfrió hasta un mínimo de seis meses, mientras que los precios de venta aumentaron al ritmo más lento desde abril.
