Se esperaba ampliamente que Alemania, que depende en gran medida del gas ruso, sufriera una recesión este año, una perspectiva que pesaba sobre toda la zona euro de 20 naciones.

"Es probable que el crecimiento del producto interior bruto se haya estancado aproximadamente en el último trimestre de 2022, superando las expectativas anteriores", declaró el Bundesbank. "Los datos publicados recientemente fueron en general mejores de lo previsto en las proyecciones de diciembre".

Los precios del gas natural en el mercado han caído más de la mitad desde principios de diciembre, ya que el consumo sigue siendo débil debido a las suaves temperaturas y Europa consigue encontrar más gas en el mercado del esperado.

Los subsidios gubernamentales para aliviar el dolor de los altos costes energéticos tanto para los hogares como para las empresas también ayudaron a apuntalar la confianza y el consumo, añadió el Bundesbank.

Los datos del PIB del primer trimestre de la zona euro se publican el 31 de enero y, aunque las previsiones oficiales apuntan a una pequeña contracción, los economistas y los responsables políticos han defendido recientemente que la cifra podría ser incluso positiva, lo que sugiere que, aunque el crecimiento sea débil, podría evitarse una recesión.