La economía alemana se contraerá un 0,4% este año, según anunció el jueves el Instituto Ifo, confirmando así sus anteriores previsiones publicadas en junio.

"Contrariamente a las expectativas anteriores, es probable que la recuperación no se materialice en la segunda mitad del año", declaró el jefe de previsiones del Ifo, Timo Wollmershaeuser.

No obstante, el Ifo mantiene su previsión para 2023 porque la oficina de estadística alemana revisó su evaluación económica del primer trimestre del año a un descenso del PIB del 0,1%, frente a una estimación anterior de una caída del 0,3%, dijo Wollmershaeuser.

"Sin esta revisión, habríamos rebajado la previsión de crecimiento económico para este año en 0,3 puntos porcentuales, hasta menos 0,7%", dijo.

Para 2024, el instituto económico espera una expansión del 1,4%, 0,1 puntos porcentuales menos de lo previsto anteriormente. En 2025, el crecimiento será del 1,2%, afirmó.

El punto brillante es el consumo privado, que debería recuperarse gradualmente en la segunda mitad de este año.

"El aumento de la renta familiar disponible seguirá siendo fuerte", dijo Wollmershaeuser. Con el lento descenso de las tasas de inflación, se producirá un aumento del poder adquisitivo, añadió.

Se prevé que la inflación disminuya lentamente del 6,9% en 2022 al 6,0% este año, y después al 2,6% en 2024 y al 1,9% en 2025.

El número de desempleados se mantendrá inicialmente elevado en 2,59 millones de personas este año y en 2,58 millones el próximo. En 2025, el desempleo debería descender a 2,43 millones de personas, según las previsiones del Ifo.

La balanza por cuenta corriente aumentará hasta el 6,9% del PIB en 2025, después de haber caído temporalmente hasta el 3,7% en 2022 como consecuencia de un fuerte aumento del precio de las importaciones. (Reportaje de Maria Martinez; Edición de Maria Sheahan)