La caída de la producción de productos de otoño -incluido el maíz, muy afectado por la sequía estival en Francia- conllevaría una reducción de los costes de secado de algunas cosechas y de los transportes, dijo en un comunicado en el que detallaba las medidas para reducir su consumo de energía en al menos un 10%.

La primera ministra francesa, Elisabeth Borne, instó el lunes a las empresas a elaborar planes de ahorro energético antes del mes que viene, advirtiendo que serán las primeras en verse afectadas si alguna vez Francia no tiene más remedio que racionar el suministro de gas y electricidad.

Las medidas de ahorro de energía de InVivo incluyen también la reducción de la calefacción y el aumento de la temperatura del aire acondicionado, así como el apagado de los equipos eléctricos por la noche, dijo.

InVivo es uno de los mayores grupos agrícolas europeos, con actividades en el comercio de cereales, la producción de malta, la venta al por menor de alimentos y productos de jardinería, la distribución de vino y la panadería industrial.