Una docena de republicanos de extrema derecha, en su mayoría miembros del ultraconservador Freedom Caucus de la Cámara de Representantes, se unieron a los demócratas para derrotar una medida no relacionada que permitía debatir y votar la aprobación de resoluciones republicanas contrarias a las políticas de Biden sobre vehículos eléctricos y otros temas.
Los miembros del grupo de la Cámara de Representantes, que esperan imponer un menor gasto y restricciones fronterizas, dijeron que votaban para protestar por el acuerdo de gasto de 1,59 billones de dólares alcanzado por Johnson con Schumer, que ha aumentado las esperanzas de que los legisladores puedan evitar un cierre parcial del gobierno en poco más de una semana.
Republicanos y demócratas en el Congreso están tratando de elaborar una legislación de gastos bipartidista para el año fiscal que comenzó el 1 de octubre después de meses de luchas internas republicanas y retrasos. La financiación de algunas agencias federales expira el 19 de enero, mientras que otras se quedarán sin dinero el 2 de febrero.
"Mi esperanza es persuadir al portavoz y al liderazgo y a toda la conferencia republicana para que no sigan adelante con el acuerdo", dijo el representante Bob Good, que preside el Freedom Caucus de la Cámara de Representantes.
"El acuerdo... no asegura la frontera y... no recorta nuestro gasto, y va a ser aprobado aparentemente... con votos predominantemente demócratas", añadió Good, calificando la perspectiva de "inaceptable".
Con una mayoría de 220-213 en la Cámara, Johnson puede permitirse perder no más de tres votos republicanos en medidas a las que se oponen los demócratas. Cuando la medida del miércoles fracasó por 203-216, el presidente de la Cámara regresó a su despacho mientras ignoraba las preguntas de los periodistas.
Cuando se le preguntó si los partidarios de la línea dura seguirían obstaculizando la legislación, el destacado representante conservador Chip Roy dijo a los periodistas: "Ya veremos. Quiero decir, ahora mismo, la cuestión aquí es que no estamos ni remotamente satisfechos".
Algunos de los mismos republicanos de línea dura cerraron el hemiciclo de la Cámara el pasado junio para protestar por un acuerdo sobre el techo de la deuda entre el presidente Joe Biden y el entonces portavoz Kevin McCarthy. Ese acuerdo constituyó la base del acuerdo de gasto de Johnson con Schumer.
McCarthy fue destituido del cargo de portavoz cuatro meses después, tras evitar un cierre del gobierno el 1 de octubre con una medida provisional bipartidista.
Los partidarios de la línea dura han empezado a hablar recientemente de la posibilidad de someter a Johnson a un destino similar. Preguntado sobre esa posibilidad, el representante de línea dura Andy Biggs dijo: "Eso es hipotético y preferiría que lo resolviéramos de otro modo". Biggs fue uno de los ocho republicanos que se unieron a los demócratas para expulsar a McCarthy el pasado octubre.
Los republicanos del Senado dijeron el martes que el Congreso necesitará aprobar una medida de financiación a corto plazo para mantener abierto el gobierno federal mientras los legisladores trabajan para aprobar proyectos de ley de financiación.
Se espera ampliamente que Johnson lleve la legislación de gastos al pleno de la Cámara a través de un proceso parlamentario que impediría a los partidarios de la línea dura bloquearla.
Cuando se le preguntó si le preocupaba la posibilidad de perder su puesto por el acuerdo de gastos, Johnson respondió: "Eso no me preocupa. Estamos liderando".
