La libra esterlina subió un 0,21% a 1,26 dólares el viernes, tras haber alcanzado los 1,263 dólares a principios de la sesión, el nivel más alto desde finales de mayo del año pasado.

El euro bajaba un 0,14% frente a la libra, a 87,49 peniques, tras caer anteriormente a 87,42 peniques, el nivel más bajo desde el 6 de abril.

Según los analistas, la libra ha recibido un impulso de la reunión de la Reserva Federal estadounidense de esta semana, en la que el banco central subió los tipos en 25 puntos básicos pero dio a entender que podría detenerse ahí. Los datos de empleo de EE.UU., que se publicarán el viernes a las 1230 GMT, darán pistas sobre el probable próximo movimiento de la Fed.

Por el contrario, muchos analistas creen que el Banco de Inglaterra tendrá que seguir subiendo los tipos, dado que la inflación es mucho más fuerte en Gran Bretaña, con un 10,1% interanual en marzo, frente al 5% de Estados Unidos.

"El hecho de que la Fed abandonara parte del lenguaje de halcones de su comunicado de esta semana permitió a los mercados consolidar su opinión de que este es el final del ciclo de subidas en Estados Unidos", dijo Joe Tuckey, jefe de análisis de divisas del broker Argentenx. "La libra esterlina ha podido sacar provecho de ello".

Cuando parece que los tipos de interés van a subir en un país pero se mantienen planos en otro, puede hacer que las inversiones en el primer país parezcan más atractivas, impulsando potencialmente la divisa.

Una economía más fuerte de lo esperado, aunque todavía mediocre, también ha apoyado a la libra. Los economistas han estado pendientes de la recesión, pero aún no se ha materializado, en parte por la caída de los precios de la energía.

Mientras tanto, la rápida ralentización de la inflación en Estados Unidos y el hecho de que la Reserva Federal se acerque al final de su ciclo de subidas han hecho caer al dólar frente a una serie de divisas.

El índice dólar, que mide la divisa estadounidense frente a sus principales pares, bajó ligeramente el viernes y se situó un 0,34% por debajo en la semana.

El dinamismo de la libra esterlina frente al euro también puede explicarse en parte por las perspectivas de los bancos centrales, según Chris Turner, responsable mundial de mercados de ING.

El Banco Central Europeo subió el jueves los tipos en 25 puntos básicos, lo que supone un paso atrás en el ritmo de endurecimiento monetario. La inflación de la zona euro también se ha enfriado más rápido que la británica.

"La libra esterlina va mejor. En parte se debe al BCE, que fue menos halcón de lo esperado y eso restó algo de fuelle al euro", dijo Turner.

Los operadores esperan en general que el Banco de Inglaterra suba los tipos 25 puntos básicos, hasta el 4,5%, el jueves de la semana que viene, según los precios de los mercados de derivados.

A continuación, prevén que los tipos suban hasta un máximo de alrededor del 4,8% a finales de año.

Dominic Bunning, jefe de investigación de divisas europeas de HSBC, dijo que la libra podría subir a alrededor de 1,30 dólares más adelante en el año.

"Esta no es una historia de una positividad absoluta", dijo. "No estamos buscando ganancias mucho, mucho mayores aquí".