Frente al dólar, la libra subió un 0,24% hasta 1,2395 dólares, mientras los operadores se preparaban para la próxima decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés en Estados Unidos.

El miércoles, los datos oficiales de los precios al consumo mostraron que la inflación británica cayó más de lo esperado en noviembre, hasta el 10,7%, desde el 11,1% de octubre, el nivel más alto en 41 años.

"El panorama sigue siendo coherente con lo que nos dijo el Banco de Inglaterra la última vez que se reunió, que era que el máximo de la inflación probablemente se situaría en torno al 11% en octubre", dijo Adam Cole, jefe de estrategia de divisas de RBC Capital Markets.

La libra esterlina se mantuvo prácticamente plana frente al euro, en 85,985 peniques.

Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que la tasa de inflación caería hasta el 10,9%. Tanto la inflación de EE.UU. como la de la zona euro cayeron el mes pasado más de lo previsto, lo que hace albergar esperanzas de que la actual oleada inflacionista haya tocado techo.

El mercado está pendiente de la decisión sobre los tipos de interés que tomará el BoE el jueves, y los operadores sitúan en un 70% las probabilidades de un aumento de 50 puntos básicos (pb) del tipo bancario.

"La cuestión es cómo responde mañana el BoE", dijo Cole. "Lo que los mercados estarán mirando es, si obtenemos la subida de 50 pb que se espera, ¿cuánta disensión hubo en torno a eso?".

Los responsables políticos británicos llevan subiendo los tipos desde finales de 2021 para intentar reducir la inflación de dos dígitos, pero cada vez están más divididos sobre cuánto endurecimiento es necesario a medida que la economía se adentra en la recesión. Las últimas cifras de inflación podrían respaldar la idea de que el endurecimiento debería ralentizarse.

"Creemos que en los próximos tres o cuatro meses, es probable que el péndulo se incline hacia el fondo del crecimiento débil si la inflación sigue bajando. Hoy hay razones de peso para que hagan una pausa mucho antes de lo que espera el mercado", dijo Cole, que tiene una opinión negativa sobre la libra a corto y largo plazo.

Los datos oficiales del lunes mostraron un repunte de la economía británica en octubre, pero las perspectivas de la economía británica siguen siendo turbias y el temor a una profunda recesión sigue pesando en la mente de los operadores.

La libra tocó los 1,2345 dólares frente al dólar el 5 de diciembre, su nivel más alto desde mediados de junio, recuperándose casi un 20% desde el mínimo histórico alcanzado a finales de septiembre, pero sigue siendo un 8,4% más baja en 2022.