Los futuros de la soja estadounidense tocaron el viernes un máximo de 6 semanas y media, impulsados por un clima desigual en la cosecha del principal productor de soja, Brasil, y una nueva demanda de exportación para los suministros estadounidenses, junto con una caída del dólar que reforzó también los futuros del maíz y el trigo.

Los futuros de la soja de enero de la Bolsa de Comercio de Chicago (CBOT) subieron 23 centavos y medio, a 13,51-3/4 dólares por bushel, tras alcanzar los 13,55 dólares, el precio más alto del contrato desde el 18 de septiembre.

El maíz de diciembre de la CBOT terminó con una subida de 7-1/4 centavos a 4,77-1/4 dólares por bushel, recuperándose tras una caída a 4,68 dólares, un mínimo de seis semanas. Y el trigo CBOT de diciembre terminó con una subida de 7 centavos a 5,72-1/2 dólares el bushel.

Las tres materias primas recibieron un impulso después de que los datos mostraran que el crecimiento del empleo en EE.UU. se ralentizó más de lo esperado en octubre, subrayando las opiniones de que la Reserva Federal podría haber terminado de subir los tipos de interés. El índice del dólar tocó mínimos de seis semanas tras conocerse la noticia, lo que hizo que los cereales y la soja estadounidenses resultaran más atractivos en el mercado mundial.

"(La ruptura del dólar) ayuda a nuestra postura competitiva para las exportaciones... Eso ha sido algo que ha jugado en nuestra contra", dijo Terry Linn, analista de Linn & Associates en Chicago.

La soja obtuvo otro impulso cuando el Departamento de Agricultura de EE.UU. confirmó ventas privadas de 131.150 toneladas métricas de soja estadounidense a destinos desconocidos.

Mientras tanto, los operadores están vigilando el clima errático de los cultivos en Brasil, donde la siembra de soja está en marcha. "Estamos viendo una mayor preocupación por el irregular inicio de la temporada de cultivo en Brasil", dijo Linn.

Las condiciones secas han sido una preocupación en porciones del principal estado productor de soja, Mato Grosso, mientras que las lluvias excesivas han empapado las zonas del sur. Aún así, la correduría StoneX elevó esta semana su previsión de la cosecha de soja de Brasil para 2023/24 a 165 millones de toneladas métricas, desde la previsión anterior de 164,1 millones.

Los agricultores de Argentina recibieron entre 50 y 60 milímetros (2-2,4 pulgadas) de lluvia el jueves, lo que supuso un alivio para los cultivos, según informó la bolsa de cereales de Rosario.

La cosecha está terminando en Estados Unidos, lo que frena el ritmo de las ventas relacionadas con coberturas en los futuros de maíz y soja de CBOT. Los analistas esperan los informes mensuales de oferta y demanda del USDA del 9 de noviembre, en los que el gobierno publicará estimaciones actualizadas de la cosecha estadounidense y mundial. (Reportaje de Julie Ingwersen; información adicional de Peter Hobson en Canberra y Sybille de La Hamaide en París; edición de Subhranshu Sahu, Rashmi Aich, David Evans, Paul Simao y Cynthia Osterman)