Las exportaciones chinas crecieron por primera vez en seis meses en noviembre, según mostraron el jueves los datos aduaneros, lo que sugiere que el sector manufacturero puede estar empezando a beneficiarse de un repunte de los flujos comerciales mundiales.

Las exportaciones chinas aumentaron un 0,5% en noviembre respecto al año anterior, frente a la caída del 6,4% de octubre y superando el descenso del 1,1% previsto en un sondeo de Reuters. Las importaciones cayeron un 0,6%, tras un aumento del 3,0% en octubre.

Los datos mixtos del sector manufacturero de noviembre han mantenido vivos los llamamientos en favor de un mayor apoyo político para apuntalar el crecimiento, pero también han suscitado dudas sobre si las encuestas predominantemente negativas basadas en el sentimiento han enmascarado mejoras en las condiciones.

El índice Baltic Dry, un indicador de referencia del comercio mundial, subió en noviembre a máximos de tres años, apoyado por la mejora de la demanda de materias primas industriales, en particular de China.

Las exportaciones surcoreanas, otro indicador de la salud del comercio mundial, subieron por segundo mes consecutivo en noviembre, impulsadas por las exportaciones de chips, que pusieron fin a 15 meses de descensos.

Los analistas afirman que es demasiado pronto para saber si el reciente apoyo político será suficiente para apuntalar la demanda interna, ya que el sector inmobiliario, el desempleo y la débil confianza de los hogares y las empresas amenazan con un repunte sostenible.

El sector manufacturero también funciona a distintas velocidades según las industrias, advierten los analistas.

El Fondo Monetario Internacional mejoró en noviembre sus previsiones de crecimiento de China para 2023 y 2024 en 0,4% puntos porcentuales cada una. Pero Moody's lanzó el martes una advertencia de rebaja de la calificación crediticia A1 de China.