En los últimos años, la élite de la Guardia Revolucionaria iraní ha detenido a decenas de ciudadanos con doble nacionalidad y extranjeros, en su mayoría por cargos relacionados con el espionaje y la seguridad.

"Las negociaciones con Irán sobre el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA, por sus siglas en inglés) llevan meses celebrándose. Mientras tanto, varios ciudadanos europeos son rehenes de la República Islámica de

República de Irán", decía una carta dirigida a Borrell vista por Reuters, fechada el 6 de septiembre.

Estaba firmada por los familiares de Benjamin Brière, Kamran Ghaderi, Ahmadreza Djalali y Jamshid Sharmahd.

"Nosotros, las familias de los ciudadanos franceses, suecos, alemanes y austriacos, que han sido detenidos ilegalmente por el régimen iraní, estamos indignados porque la Unión Europea parece ignorar estos crímenes".

La oficina de Borrell no estaba inmediatamente disponible para hacer comentarios.

Las conversaciones para reactivar un acuerdo de 2015 para frenar el programa nuclear iraní a cambio de la relajación de las sanciones están estancadas desde marzo, a pesar de que en agosto se esperaba un avance.

La UE es la coordinadora de las conversaciones indirectas entre Irán, Estados Unidos y las potencias mundiales y el lunes Borrell dijo que tenía menos confianza en alcanzar un acuerdo tras recibir la última propuesta de Teherán.

Los grupos de derechos han acusado a Irán de intentar obtener concesiones de otros países mediante este tipo de detenciones. Irán, que no reconoce la doble nacionalidad, niega haber tomado prisioneros para obtener ventajas diplomáticas.

"Todos ellos se preguntan si los funcionarios de la UE se han olvidado de ellos y cuánto tiempo más tendrán que soportar este calvario", dice la carta, que pide a Borrell que se centre en su liberación.

"¿Se dará prioridad a su liberación? ¿Priorizará la Unión Europea la defensa de sus valores, la defensa de los derechos humanos, por encima de los intereses económicos y de otro tipo?", añadía la carta.