Los fabricantes de automóviles chinos también están intentando ensamblar vehículos en Rusia y localizar la producción, declaró a la prensa Xu Haidong, ingeniero jefe adjunto de la Asociación China de Fabricantes de Automóviles (CAAM).
"Sigue habiendo una gran demanda en el mercado ruso, pero no dependerá necesariamente sólo de las importaciones", dijo Xu.
"Las exportaciones chinas de automóviles a Rusia seguirán teniendo una gran demanda en los próximos 2-3 años y después de eso el sector automovilístico chino probablemente aumentará su localización en el mercado ruso".
Rusia fue el primer destino de las exportaciones chinas de automóviles durante los siete primeros meses del año, según los datos de la CAAM, con 464.000 coches vendidos. México ocupó el segundo lugar con 224.000 unidades.
Para el conjunto del año pasado, México fue el primer importador de automóviles chinos con 254.000 unidades, mientras que Rusia fue el quinto importador con 162.000 unidades, mostraron los datos de la CAAM.
Los coches chinos importados representan ahora el 49% del mercado ruso, alcanzando las 40.000 unidades en junio, frente a una cuota anterior a la guerra de apenas el 7% en junio de 2021, según datos de la empresa de análisis Autostat. Las empresas chinas también están ensamblando vehículos en Rusia, ocupando fábricas desocupadas por los fabricantes de automóviles occidentales.
China es el mayor mercado automovilístico del mundo, pero los fabricantes chinos miran cada vez más al extranjero para compensar la intensa competencia y el debilitamiento de la demanda en su país.
