WASHINGTON, 24 feb (Reuters) - La venta de casas unifamiliares nuevas en Estados Unidos subió más de lo previsto en enero, apoyada por tasas hipotecarias históricamente bajas y una gran escasez de viviendas usadas en el mercado.

El Departamento de Comercio dijo el miércoles que las ventas de casas nuevas subieron un 4,3% a una tasa anual desestacionalizada de 923.000 unidades el mes pasado. Economistas habían previsto un alza de 2,1% a 855.000 unidades.

La cifra de diciembre se revisó a 885.000 unidades desde las 842.000 unidades que se reportaron inicialmente.

Las ventas de viviendas nuevas se extraen de una muestra de viviendas seleccionadas a partir de permisos de construcción y tienden a ser volátiles de mes a mes. Las transacciones aumentaron un 19,3% interanual en enero. Las ventas subieron en el sur, el medio oeste y el oeste, pero disminuyeron en el noreste.

Los mercados financieros estadounidenses se vieron poco afectados por los datos.

La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios informó la semana pasada que la oferta de viviendas usadas disponibles para la venta se desplomó a un mínimo histórico en enero, lo que ha empujado a los compradores hacia el mercado de viviendas nuevas. La demanda de viviendas está siendo impulsada por los estadounidenses que buscan más espacio para trabajar y la educación a raíz de la pandemia de COVID-19.

Aunque las tasas hipotecarias han aumentado en las últimas semanas junto con los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, a medida que los inversores anticipan un crecimiento económico más fuerte y una mayor inflación, siguen siendo muy bajas según los estándares históricos.

El gobierno informó la semana pasada que los permisos de construcción se dispararon en enero a su nivel más alto desde mayo de 2006. Pero los costosos insumos y la falta de terrenos representan una amenaza para las continuas y sólidas ganancias del mercado inmobiliario.

Según una encuesta de constructores de viviendas unifamiliares de este mes, los precios récord de la madera estaban "agregando miles de dólares al costo de una casa nueva y causando que algunos constructores detuvieran los proyectos abruptamente".

El precio medio de una vivienda nueva aumentó un 5,3% respecto al año anterior a 346.400 dólares en enero. El mes pasado hubo 307.000 viviendas nuevas en el mercado, frente a las 299.000 de diciembre. Al ritmo de ventas de enero, se necesitarían 4 meses para liquidar la oferta de viviendas en el mercado, por debajo de los 4,1 meses de diciembre.

(Reporte de Lucia Mutikani. Editado en español por Janisse Huambachano y Rodrigo Charme)