El principal partido en el poder, el MPLA, sigue siendo el favorito, pero el margen es lo suficientemente estrecho como para que la coalición opositora UNITA obtenga una victoria sorprendente.

Esto podría cambiar las relaciones con las superpotencias mundiales, con unos lazos posiblemente menos amistosos con Rusia.

El presidente Joao Lourenco, que busca la reelección, votó rodeado de una fuerte seguridad.

"Acabamos de ejercer nuestro derecho al voto. Es rápido y sencillo. Aconsejamos a todos los ciudadanos con derecho a voto que hagan lo mismo. Al final, ganaremos todos, ganará la democracia y ganará Angola".

El líder de la oposición, Adalberto Costa Junior, se vio obligado a votar en un colegio electoral distinto al que le correspondía por problemas de registro.

"Mi expectativa es que la jornada transcurra con normalidad, que sea tranquila, y que al final del día se respeten todos los votos, se coloquen todos los resultados en los colegios electorales como dice la ley. Y que Angola celebre sus elecciones".

La Comisión Electoral Nacional dijo a los periodistas el miércoles por la mañana que, entre comillas, "el proceso se está desarrollando de forma ordenada y pacífica".

En un tenso período previo a la votación tanto para presidente como para parlamento, UNITA instó a los votantes a permanecer cerca de los colegios electorales después de votar para reducir el riesgo de fraude.

Los analistas afirman que las normas de recuento de votos modificadas pueden retrasar los resultados oficiales durante días.

Esto podría aumentar las tensiones que algunos temen que puedan desembocar en violencia.

Una victoria de la UNITA podría debilitar décadas de estrechos lazos con Moscú.

El MPLA fue un apoderado de la guerra fría durante los 27 años de guerra civil en Angola, que terminó en 2002, mientras que la UNITA estaba respaldada por Estados Unidos.

Costa Junior dijo en Twitter que la UNITA condenaba "la invasión de Ucrania por parte de Rusia".

También viajó a Bruselas y a Washington para estrechar lazos con sus socios occidentales antes de las elecciones.

Lourenco se ha abierto a Occidente desde su elección en 2017.

Pero en marzo, Angola se abstuvo de apoyar una resolución de Naciones Unidas que condenaba la guerra de Rusia en Ucrania.