Las protestas desafiaron lo que muchos residentes de la ciudad veían como un recorte de las libertades por parte de China en la antigua colonia británica, que volvió a ser gobernada por China en 1997, pero mantuvo una medida de autonomía.
"El año 2019 fue el peor y el mejor para Hong Kong desde 1997", dijo Chow. "Por muy terribles que fueran las imágenes de las noticias en la televisión, creo que lo peor estuvo a la vista de todos".
Hong Kong fue devuelto a China en 1997 con la promesa de 50 años de autonomía. En ese año, hubo 59.250 nacimientos en la ciudad, según datos del gobierno. Ahora, con 25 años, Patrick Poon acaba de lanzar su propio negocio de medios digitales el año pasado y está encontrando su propio camino en Hong Kong. Aunque algunos de sus amigos se han marchado y han empezado una nueva vida en otro lugar, Poon tiene la intención de quedarse.
"No hay duda de que la edad de oro de Hong Kong ha pasado", dijo Poon. "Esta ciudad ha cambiado mucho, al igual que su entorno. Tenemos que ser más prudentes a la hora de hacer las cosas. Algunos objetivos se han vuelto difíciles de alcanzar. Pero esta ciudad sigue estando llena de esperanza, vitalidad y competitividad, algo que creo que no ha cambiado."
El 1 de julio de 1997, Sum Wan Wah era reportero de televisión para la cadena de televisión de Hong Kong (TVB) y cubría las protestas ante el lugar principal de la ceremonia de traspaso. Tras la introducción de una ley de seguridad nacional en 2020, múltiples medios de comunicación fueron objeto de una represión en todo el sector que provocó un éxodo masivo de periodistas del sector.
En mayo de 2022, Sum, de 50 años, y otros cuatro antiguos periodistas decidieron abrir una librería, Have a Nice Stay, que vende principalmente literatura de temática periodística, con la esperanza de inspirar a la próxima generación de jóvenes reporteros para que sigan luchando por la libertad de prensa.
"En 1997, muchos predijeron que el espíritu de Hong Kong se extinguiría, pero no fue así", dijo Sum. "Después de 1997, la evolución de Hong Kong fue bastante positiva. Fue inesperado que Hong Kong ya no se pareciera al Hong Kong que conocíamos después de 25 años. Los cambios que se produjeron en uno o dos años tras la aplicación de la ley de seguridad nacional empujaron a Hong Kong a una posición que no deseábamos."
