Saied despidió a 57 jueces este mes, acusándolos de corrupción y de proteger a terroristas, cargos que, según la Asociación de Jueces de Túnez, tienen en su mayoría una motivación política. La primera huelga comenzó el 4 de junio.

La decisión de Saied provocó una oleada de críticas nacionales y extranjeras. Diez grupos internacionales de derechos le acusaron de asestar "un profundo golpe a la independencia judicial".