Kwarteng debe esbozar planes para ayudar a los hogares y a las empresas en los próximos meses en el marco de la agenda económica de la recién investida primera ministra Liz Truss.

Los inversores están deseosos de conocer detalles sobre el enorme coste de los planes, cuyas estimaciones oscilan entre 100.000 y 200.000 millones de libras (115.000-230.000 millones de dólares).

Sin embargo, la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR) no publicará previsiones detalladas el próximo viernes, según indicaron fuentes gubernamentales la semana pasada.

"Estas previsiones son un indicador vital de la salud de las finanzas de la nación y proporcionan tranquilidad y confianza a los mercados e inversores internacionales", declaró Mel Stride, presidente del Comité del Tesoro que examina los planes económicos del gobierno.

Stride -uno de los principales partidarios del ex ministro de Finanzas Rishi Sunak en la contienda del Partido Conservador para suceder a Boris Johnson- afirmó que las perspectivas económicas se habían agriado desde que el OBR publicó por última vez sus previsiones en marzo.

"Ha habido intervenciones fiscales significativas desde entonces y se nos dice que habrá más intervenciones significativas, incluyendo importantes recortes fiscales permanentes que se anunciarán el viernes", dijo Stride.

"En estas circunstancias, es vital que se proporcione una previsión independiente de la OBR".

Durante la contienda por el liderazgo, Sunak dijo que los recortes fiscales sin financiación de Truss serían inflacionistas, mientras que Truss dijo que el aumento de los impuestos sobre las nóminas y el plan de Sunak de elevar el impuesto de sociedades harían más probable una recesión.

El mes pasado, el OBR dijo que podría proporcionar una previsión parcial para acompañar a una declaración fiscal de finales de septiembre, además de la previsión completa que se publicará con un presupuesto anual previsto para antes de finales de año.