La investigación, bautizada como "Operación Chacal", fue dirigida en mayo por las fuerzas del orden en 21 países de seis continentes y tuvo como objetivo grupos de ciberdelincuentes como la banda criminal nigeriana "Black Axe", según informó la organización policial internacional en un comunicado.

"No importa dónde se escondan en el ciberespacio, INTERPOL los perseguirá sin descanso", declaró Isaac Kehinde Oginni, director del Centro de Interpol contra la Delincuencia Financiera y la Corrupción (IFCACC), refiriéndose a los grupos delictivos.

Entre el 15 y el 29 de mayo se congelaron o incautaron 2,15 millones de euros, se detuvo a 103 personas, se identificó a 1.110 sospechosos y se bloquearon 208 cuentas bancarias.

Una operación similar tuvo lugar en 2022 y se saldó con la interceptación de 1,2 millones de euros y 75 detenciones.