El rescate de las víctimas, que llegaron a Kuala Lumpur el martes, se produce en medio de las redadas efectuadas esta semana en Camboya contra compuestos de ciberdelincuentes sospechosos de traficar con personas en el país para que trabajen en centros de llamadas ilegales de apuestas y estafas.

En un comunicado a última hora del miércoles, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Malasia dijo que había recibido 301 informes de personas atrapadas por las redes de estafa laboral en Camboya, así como en Laos, Myanmar y Tailandia.

De ellas, 168 personas han sido rescatadas, 34 estaban retenidas en centros de detención de inmigrantes y otras 99 seguían siendo localizadas, dijo.

Las víctimas de los chanchullos dicen que fueron atraídas a Camboya con promesas de trabajos bien remunerados en casinos y hoteles, pero que en cambio fueron obligadas a vivir en complejos y a estafar a los usuarios en línea con romances en Internet y esquemas de criptomonedas.

Las autoridades camboyanas han dicho que han encontrado pruebas de juego ilegal, confinamiento ilegal y tortura, prostitución, posesión ilegal de armas, blanqueo de dinero y tráfico de personas en uno de los complejos.