Portugal planea aumentar el peso de las energías renovables hasta el 51% de sus necesidades energéticas finales para 2030, desde el objetivo actual del 47%, como parte de su meta de convertirse en un país neutro en carbono para 2045, según informó el Gobierno el miércoles.

El nuevo objetivo forma parte de un borrador actualizado de los objetivos energéticos y climáticos que el nuevo gobierno de Portugal está ultimando y que se debatirá en breve en el parlamento antes de ser enviado a Bruselas.

La ministra de Medio Ambiente y Energía, Maria da Graca Carvalho, declaró ante una comisión parlamentaria que el aumento del objetivo "es una evolución sustancial" y "será fundamental para orientar nuestra trayectoria de descarbonización en todos los sectores".

El peso de las energías renovables en el consumo final de energía en Portugal era del 34,7% en 2022, lo que situaba a Portugal en sexto lugar entre los 27 Estados miembros de la UE, según datos oficiales.

El consumo final de energía es el total de la energía consumida por los hogares, la industria y la agricultura, excluyendo la utilizada por el propio sector energético.

El borrador revisado mantendrá el compromiso de Portugal de llevar a cabo su primera subasta de energía eólica marina de hasta 2 gigavatios (GW) de capacidad, aunque recortará el objetivo de contar con 5,5 GW de nueva capacidad de electrolizadores para la producción de hidrógeno verde en 2030.

Carvalho dijo que el proceso de concesión de licencias para las inversiones en energías renovables se racionalizará para dar a los promotores un único punto de contacto con el gobierno, en lugar de tener que relacionarse con hasta 14 entidades oficiales antes de obtener la aprobación final.

Los promotores han dicho que la lentitud de la concesión de licencias estaba provocando retrasos en los proyectos.

Portugal pretende generar el 85% de su producción anual de electricidad a partir de fuentes renovables para 2030, frente al 61% en 2023, uno de los ratios más altos de Europa. (Reportaje de Sergio Goncalves; Edición de Charlie Devereux y Jan Harvey)