Estados Unidos, la Unión Europea y Gran Bretaña han advertido repetidamente a Putin de que no ataque a Ucrania después de que Rusia desplegara unos 100.000 soldados cerca de la frontera con su antiguo vecino soviético.

Los funcionarios rusos dicen que Occidente está atenazado por la rusofobia y no tiene derecho a dar lecciones a Moscú sobre cómo actuar después de que ampliara la alianza militar de la OTAN hacia el este tras la caída de la Unión Soviética en 1991 y sembrara el caos en Irak y Siria.

El Centro Nacional de Seguridad Cibernética (NCSC) de Gran Bretaña, que forma parte de la agencia de inteligencia GCHQ de espionaje, advirtió a las grandes organizaciones que deben reforzar su resistencia en materia de seguridad cibernética en medio de las crecientes tensiones por Ucrania.

Los líderes occidentales afirman que el siglo XXI se definirá por una lucha entre las democracias y rivales como China y Rusia que, según ellos, están desafiando el consenso de la posguerra fría desde el punto de vista militar, tecnológico y económico.

"A lo largo de varios años, hemos observado un patrón de comportamiento malicioso de Rusia en el ciberespacio", dijo Paul Chichester, director de operaciones del NCSC.

Un ciberataque contra Ucrania a principios de este mes advirtió a los ucranianos de que "tuvieran miedo y esperaran lo peor". Ucrania dijo que Moscú estaba detrás del ataque.

"Los incidentes en Ucrania tienen las características de una actividad rusa similar que hemos observado antes", dijo Chichester.

Las principales potencias ofensivas cibernéticas del mundo son Estados Unidos, Reino Unido, Rusia y China, según una clasificación realizada en 2020 por el Centro Belfer de la Escuela Kennedy de Harvard.

Los responsables del espionaje británico afirman que Rusia sigue siendo la mayor amenaza inmediata para Occidente, pero el dominio a largo plazo de la tecnología por parte de la China comunista supone un problema mucho mayor.

"Se está instando a las organizaciones del Reino Unido a que refuercen su resistencia en materia de ciberseguridad en respuesta a los incidentes cibernéticos maliciosos ocurridos en Ucrania y sus alrededores", declaró el Centro Nacional de Ciberseguridad de Gran Bretaña.