Los soldados sudafricanos forman parte de una fuerza regional del sur de África que ayuda a Mozambique a luchar contra una insurgencia vinculada al Estado Islámico que se ha cobrado miles de vidas desde 2017.

El vídeo se hizo viral en las redes sociales esta semana, lo que provocó una declaración de la Fuerza de Defensa Nacional Sudafricana en la que se afirmaba que se creía que el incidente había ocurrido en noviembre de 2022 y que se castigaría a cualquiera que fuera declarado culpable de los actos que se veían en el clip.

Reuters no ha podido verificar el contenido del vídeo.

La fuerza regional sudafricana SAMIM ha puesto en marcha una investigación.

"Estamos ansiosos por comprender lo que ocurrió realmente", declaró el jueves a la prensa el portavoz de Ramaphosa, Vincent Magwenya.

Amnistía Internacional declaró el jueves que la seguridad en la provincia septentrional mozambiqueña de Cabo Delgado, donde se concentra la insurgencia, "no debe producirse a costa de violaciones de los derechos humanos".

Afirmó que el vídeo "da una idea de lo que está ocurriendo... en esta guerra olvidada".

El gobierno mozambiqueño aún no ha comentado el vídeo.

Hage Geingob, presidente de Namibia y actual presidente del órgano de política, defensa y seguridad de la Comunidad para el Desarrollo del África Austral, declaró esta semana que el bloque regional tomaría medidas acordes con el derecho de los conflictos armados una vez finalizada la investigación.