Los bancos centrales de todo el mundo están empezando a desmarcarse del pelotón a medida que se suceden los recortes de tipos en Europa, mientras que los costes de los préstamos en Estados Unidos podrían mantenerse al alza durante más tiempo, lo que está haciendo subir al dólar.

Una prueba clave de la inflación estadounidense está en el centro del calendario de datos y podría ser el factor decisivo en la dirección a corto plazo para los mercados.

A continuación, Rae Wee desde Singapur, Ira Iosebashvili desde Nueva York y Naomi Rovnick y Amanda Cooper desde Londres nos informan de lo que ocurrirá en los mercados esta semana.

1/PAGING RICITOS DE ORO

Ricitos de oro está recibiendo un chequeo de salud, con los datos de inflación de EE.UU. listos para mostrar si los precios al consumidor finalmente se están enfriando después de una racha de fuerza inesperada.

Durante meses, el equilibrio entre un crecimiento sólido y una inflación moderada, que algunos inversores denominan el "escenario de Ricitos de Oro", ayudó a animar los mercados, hasta que una serie de datos que mostraban que la economía era más sólida de lo esperado lo puso patas arriba.

A principios de este mes llegó cierto alivio, cuando la Reserva Federal aseguró a los mercados que seguía considerando la posibilidad de recortar eventualmente los tipos y un informe sobre el empleo en EE.UU. mostró signos de enfriamiento en el mercado laboral.

Los datos de inflación del 15 de mayo podrían mantener las buenas vibraciones si muestran que los precios al consumo aumentaron a un ritmo más lento. Pero más pruebas de una inflación obstinada podrían renovar las preocupaciones sobre los tipos de interés y reavivar la volatilidad del mercado. Los economistas encuestados por Reuters prevén que el IPC haya subido un 0,3% en abril en tasa intermensual.

2/CERRAR

Puede que Japón haya evitado por poco una recesión técnica en el cuarto trimestre, pero la narrativa sobre las perspectivas de crecimiento a más largo plazo no ha cambiado mucho.

El envejecimiento de la población y la debilidad de la demanda interna siguen asolando a la nación asiática, junto con un yen debilitado que lucha por ganar terreno, incluso después de los últimos ataques de presunta intervención de Tokio.

Las cifras de crecimiento del primer trimestre del jueves revelarán si la economía japonesa comenzó 2024 con buen pie, especialmente desde que el Banco de Japón (BOJ) realizó en marzo una salida histórica de los tipos de interés negativos, dando el pistoletazo de salida a un tímido ciclo virtuoso de subida de salarios y precios.

Pero es poco probable que la preferencia del BOJ por mantener por ahora una política monetaria acomodaticia alivie la presión sobre el yen, ya que los tipos de interés en otros lugares siguen en máximos de varias décadas, lo que a su vez estruja aún más a los hogares al aumentar los costes de importación.

3/¿HACIA DÓNDE?

El mercado de divisas parece una calle de sentido único.

Los bancos centrales ya no operan como el rebaño de subidas de tipos de 2022 y 2023, lo que deja al dólar a merced de casi todo lo demás, y es probable que la Reserva Federal mantenga altos los tipos estadounidenses durante algún tiempo.

Los especuladores mantienen ahora su mayor apuesta alcista por el dólar frente a cualquier otra divisa importante en cinco años.

Las divisas que soportan tipos bajos reciben un castigo extra, dejando al yen japonés y al franco suizo como las más rezagadas, con una caída de alrededor del 8% cada una este año.

La posición larga neta del dólar frente a otras divisas del G10 ronda los 33.000 millones de dólares. En enero, cuando los mercados anticipaban al menos cinco recortes de tipos en Estados Unidos en 2024, los inversores mantenían unos 7.230 millones de dólares en apuestas contra el dólar.

A medida que las expectativas de perspectivas de tipos se han ido deshaciendo, también lo han hecho esas posiciones bajistas. Espere más, no menos, fortaleza del dólar en el futuro.

4/MALA MANZANA

El sentimiento negativo hacia China ha dado un giro en los últimos días, aunque los inversores siguen muy de cerca el mercado inmobiliario del país y lo que va a ser de él.

Los datos de abril sobre el precio de la vivienda, que se publicarán el 17 de mayo, serán el próximo barómetro de la salud del asediado sector, sumido desde hace unos tres años en una crisis de deuda que ha dejado a los promotores inmobiliarios al borde del colapso.

La publicación se produce junto a las cifras de ventas minoristas y de la tasa de desempleo urbano que se publicarán el mismo día, y tras los decepcionantes datos del gasto del Primero de Mayo.

Los comentarios de los responsables políticos en la reunión del Politburó de abril han preparado a los inversores para una oleada de medidas de estímulo por parte de Pekín para impulsar la recuperación económica, manteniendo el ánimo del mercado boyante por ahora. Las acciones chinas se han alejado de sus mínimos de febrero, mientras que el yuan parece haber encontrado un suelo.

5/MERCADOS LABORALES DE EE.UU.

Se espera que el Banco de Inglaterra recorte los tipos de interés este año tras la relajación de la inflación, pero permanece alerta ante la posibilidad de que las subidas salariales aviven las presiones sobre los precios antes de los nuevos datos del mercado laboral que se publicarán el 14 de mayo.

Los operadores ven muchas posibilidades de que los tipos bajen en junio. Pero el banco central podría necesitar más tiempo y datos para estar seguro de que Gran Bretaña ha escapado a una espiral de salarios y precios.

El crecimiento anual de los salarios sigue al alza, mientras que la oferta de mano de obra está estancada, con más de una quinta parte de los adultos en edad de trabajar que no buscan empleo y el número de personas registradas como enfermos de larga duración que ha alcanzado los 2,83 millones, el más alto desde que comenzaron los registros en 1993.