En declaraciones a la radio France Inter, Sébastien Lecornu declaró que el fabricante de los obuses César, Nexter, había conseguido reducir a la mitad el plazo de producción de los obuses a 15 meses, lo que significa que unas 78 unidades estarán disponibles este año.

En la primera compra de Ucrania de armas de fabricación francesa desde el comienzo de la guerra, Lecornu dijo que Kiev había comprado seis por entre 3 y 4 millones de euros (entre 3,26 y 4,35 millones de dólares) cada una y que Francia estaba ahora acercándose a los aliados para comprar el resto. Ucrania dispone actualmente de 49 obuses autopropulsados César regalados por Francia y Dinamarca.

"Queremos compartir la factura y permitir que los países europeos compartan la carga financiera", declaró Lecornu.

El ministro de Defensa ucraniano tenía previsto viajar a París el jueves para asistir a una conferencia sobre la mejora del suministro de artillería a Kiev, pero la visita se canceló en el último momento.

El presidente Emmanuel Macron se dirigirá a Ucrania en febrero para ultimar un acuerdo según el cual París entregaría armamento más sofisticado, incluidos misiles de crucero de largo alcance, y asumiría compromisos políticos, de ayuda y de reconstrucción a largo plazo.

Los europeos aumentarían su apoyo a Ucrania en las próximas semanas, dijo Macron el martes, para que pudiera seguir defendiéndose, casi dos años después de la invasión a gran escala de Rusia.

Lecornu dijo que Francia también entregaría a Ucrania a partir de enero unos 50 misiles A2SM guiados de precisión al mes, adaptados para aviones de tipo soviético.

Los misiles, fabricados por Safran, pueden transportar bombas de 125, 250, 500 y 1.000 kilogramos.

El ministro también dijo que Francia también empezaría a producir a partir de este año 3.000 proyectiles de 155 mm al mes, unos 36.000 al año, frente a los 2.000 de 2023.

Los oficiales ucranianos dicen que utilizan entre 5.000 y 15.000 proyectiles al día.

(1 dólar = 0,9193 euros)