Los grupos de defensa de los derechos humanos afirman que Ruanda es uno de los países del África subsahariana con peor historial de encarcelamiento de periodistas, y acusan al gobierno de utilizar medios autoritarios para reprimir la disidencia.

El gobierno rechaza las acusaciones, afirmando que garantiza la libertad de expresión.

Jean Damascène Mutuyimana, Niyodusenga Schadrack y Jean Baptiste Nshimiyimana, reporteros del canal de YouTube Iwacu TV, fueron detenidos en octubre de 2018 por, según dijeron entonces las autoridades, causar disturbios y difundir rumores.

Se les denegó repetidamente la libertad bajo fianza antes de su juicio, según la organización sin ánimo de lucro Comité para la Protección de los Periodistas.

"No hay pruebas que demuestren que su publicación incitara a la violencia", declaró Speciose Nyirabagande, uno de los tres jueces del tribunal.

El abogado defensor del trío, Jean Paul Ibambe, se felicitó por la absolución, pero criticó la duración de su detención preventiva.

"Imagínense estar cuatro años en prisión preventiva, los tribunales deberían acelerar los procedimientos en lugar de tardar tanto tiempo", declaró Ibambe a Reuters.

Un portavoz de la fiscalía nacional declaró que el organismo respetaba la decisión del tribunal.

"El alivio por la absolución de los tres periodistas se ve ensombrecido por el hecho de que el tribunal no detuviera antes esta farsa de juicio", declaró Lewis Mudge, director para África central de la organización de defensa de los derechos Human Rights Watch.

"El hecho de que se haya celebrado un juicio enviará un mensaje escalofriante a otros que se atrevan a ejercer su derecho a la libertad de expresión en Ruanda".