HOUSTON, 13 abr (Reuters) -La estatal petrolera venezolana PDVSA añadió recientemente al menos tres nuevos compradores de coque de petróleo a su registro de clientes, ampliando su portafolio en medio de una auditoría de miles de millones de dólares en facturas impagas, según documentos y personas cercanas al asunto.

PDVSA acumuló 21.200 millones de dólares en cuentas comerciales por cobrar desde 2020, revelaron documentos vistos por Reuters el mes pasado. Las cuentas corresponden a intermediarios poco conocidos con los que ha hecho negocios para exportar su petróleo y subproductos después de que sus clientes tradicionales cortaran relaciones comerciales con Venezuela ante las sanciones de Estados Unidos.

La revisión contable ha incluido a Maroil Trading, con sede en Ginebra, propiedad del magnate naviero Wilmer Ruperti y el mayor exportador venezolano de coque de petróleo, un subproducto del procesamiento de crudo pesado. En septiembre pasado, Maroil había asumido la comercialización de la mayoría del coque que se despacha desde la terminal principal de PDVSA, una medida que redujo los riesgos para compradores finales ya que la empresa no está bajo sanciones.

"La división de comercio y suministro de PDVSA está tomando medidas para eliminar cualquier exclusividad comercial" con el coque, dijo una de las personas, y señaló que Maroil no ha dejado de recibir cargamentos, ni PDVSA lo ha suspendido como socio de negocios.

En virtud de un contrato firmado en 2017 para desarrollar un sistema de transporte de coque en Venezuela, Maroil recibió los derechos de 12 millones de toneladas métricas del subproducto del petróleo, valoradas en ese momento en 11,50 dólares por tonelada, o 138 millones de dólares, dijo a Reuters esta semana la firma Winston & Strawn LLP, que representa a la compañía.

Lo más probable es que Maroil comercialice menos de las 12 millones de toneladas inicialmente acordadas porque el precio del coque ha subido desde que se firmó el contrato. Sin embargo, las partes aún deben calcular el valor justo de mercado de cada embarque al momento de su comercialización, dijo Winston & Strawn.

"La supuesta facturación de PDVSA a Maroil no es una factura por pagar, sino una determinación del valor del producto comercializado" para calcular cuánto se ha satisfecho del valor del contrato, dijo una abogada de Winston & Strawn.

Impulsadas por las ventas de Maroil, las exportaciones de coque de Venezuela se multiplicaron por seis a 3,3 millones de toneladas el año pasado, según documentos internos de PDVSA.

Otra empresa que compró coque venezolano el año pasado, Walker International DWC-LLC, registrada en los Emiratos Árabes Unidos, también figuraba en la lista de deudores de PDVSA. PDVSA tenía cuentas por cobrar a esa empresa de 92,5 millones de dólares hasta marzo, según documentos vistos por Reuters.

RECIÉN LLEGADOS

Los nuevos compradores registrados por PDVSA en los últimos meses incluyen una unidad de Nazarovo Industrial, con sede en Caracas, cuya página web la identifica como una empresa venezolana.

A Nazarovo se le asignó un cargamento de coque de petróleo para entrega en abril, según uno de los documentos. Un buque que llegó a aguas venezolanas en marzo tiene previsto transportar 30.000 toneladas métricas de exportación, mostraron datos de Refinitiv Eikon.

A Latif Petrol LTD, otro comprador añadido al registro de clientes de PDVSA, se le asignó recientemente su primer cargamento de 48.000 toneladas. El envío partió hacia China el 23 de marzo, según los documentos y datos.

La página web de Latif Petroleum está en construcción y no proporciona detalles sobre la empresa.

Dalfa Trading DWC también se agregó recientemente a la base de datos de clientes de PDVSA y se le asignó una carga de 50.000 toneladas que no ha zarpado, dijo una de las personas.

El año pasado, PDVSA vendió ocasionalmente coque de petróleo a Rezel Catalysts Corp de China, Maxi Tankers Oil and Gas LTD, Merco Commodities Trading LTD e Info Trading SA de Panamá. A estas firmas también se les han asignado cargamentos en las últimas semanas, según la fuente y los documentos.

En todos los casos en los que se han firmado nuevos contratos y asignado cargamentos, PDVSA ha negociado precios de al menos 100 dólares por tonelada de coque, por encima de los 43-82 dólares por tonelada que pagaron sus clientes el año pasado, de acuerdo a la fuente y los documentos.

Nazarovo, Latif Petrol, Rezel Catalysts, Maxi Tankers y PDVSA no respondieron a solicitudes de comentarios. Reuters no pudo contactar a Dalfa Trading, Merco Commodities, Info Trading y Walker International.

Una investigación solicitada en octubre por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que ha llevado al arresto de más de 50 personas, se ha centrado en determinar cómo barcos petroleros zarparon del país sin que fueran pagados los cargamentos. La pesquisa ha implicado suspensiones de contratos y una amplia auditoría de las cuentas por cobrar de PDVSA.

Winston & Strawn dijo que Maroil "no tiene conocimiento de ningún impacto" en su negocio por la investigación o por la incorporación de nuevos compradores de coque por parte de PDVSA.

(Información de Marianna Parraga en Houston; información adicional de Sudarshan Varadhan en Singapur y Deisy Buitrago en Caracas; edición de Daniel Wallis; editado en español por Tomás Cobos)